Petróleos Mexicanos (Pemex) será investigado por daños al medio ambiente, sociales y económicos.
“Se instaló la Comisión especial para la prevención, conservación y, en su caso, restauración del medio Ambiente en las entidades federativas donde se ubican instalaciones de Pemex”, informó la Cámara de diputados en un comunicado.
Al 31 de diciembre de 2015, los pasivos ambientales ((sitios contaminados que no fueron remediados oportunamente) estimados y atribuidos a Pemex ascendieron a 3,521.8 millones de pesos (mdp). De este total, 819 mdp se atribuyen a Pemex Exploración y Producción, y 2,702 mdd a Pemex Transformación Industrial.
El año pasado, se incorporaron al inventario de sitios contaminados 144.58 hectáreas, de las cuales, Pemex reparó 47.49 hectáreas, que deja un inventario total de 1,161.93 hectáreas afectadas, un incremento de 9% respecto a 2014 y que Pemex atribuye al robo de combustibles.
El año pasado, el índice de frecuencia de accidentes aumentó 23.7%. Los principales contribuyentes a este incremento fueron el segmento de refinación con el 51.7%, con 31.4% el segmento de exploración y producción, y con el 30.0% el segmento de petroquímica, comparado con el índice de 2014.
Uno de los primeros temas que abordará la Comisión, será la explosión del buque petrolero Burgos, propiedad de Pemex, frente a las costas del Puerto de Veracruz.
El documento no mencionó si también se investigará la explosión en el complejo de Pajaritos, en Veracruz, quedó 32 muertos y 130 heridos, y donde Pemex es socia minoritaria con Mexichem.
La organización no gubernamental (ONG) Greenpeace presentó resultados sobre muestras de agua del río Coatzacoalcos y suelo recolectadas el 23 y 24 de abril de 2016, en busca de sustancias químicas peligrosas en la zona afectada tras la explosión ocurrida unos días antes. Detectó 54 químicos orgánicos de la tubería que descarga el complejo Pajaritos.
“Se encontraron etenos clorados, etanos clorados, y metanos clorados, así como bencenos clorados. Además, contiene una amplia gama de químicos orgánicos semivolátiles”, citó el organismo ambiental en su reporte Pajaritos, bomba de tóxicos, presentado el 20 de junio de 2016.
El químico predominante es el Dicloruro de Etileno (EDC, por sus siglas en inglés), sustancia catalogada como posible cancerígeno por la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer (IARC) y los servicios de salud de Estados Unidos. Las concentraciones halladas de EDC superan de 10 a 28 veces los límites que establece Estados Unidos respecto a las aguas residuales que vierte el sector de los plásticos.
Los principales estados con los que colaborarán son Campeche, Tamaulipas, Guanajuato, Puebla, Chiapas, Hidalgo, Tabasco y Veracruz, ya que estos cuentan con refinerías y complejos petroquímicos de Pemex.
Dentro de su proyecto de trabajo, dijo la legisladora, están realizar reuniones de trabajo con servidores públicos de Semarnat, SEP, SENER, Salud, Sedesol, Segob, Profepa, CFE, Pemex, PGR, y la Comisión Nacional de Hidrocarburos, entre otras dependencias.
La nueva Comisión emitirá opiniones sobre los temas que le competen, y presentarán al pleno de los diputados un informe de actividades anual y final. Además, se proyecta realizar foros con centros de estudios e investigación, organizaciones, empresas y sociedad civil para recabar elementos que ayuden a promover soluciones a las problemáticas que genera Pemex.
Fuente: Forbes