La reciente compra de Pepsi es la de SodaStream, una empresa que fabrica máquinas para producir refrescos en casa, la compañía pagó 3 mil 200 millones de dólares por la adquisición.
Se trata de una firma que se dedica tanto a fabricar como a distribuir aparatos para hacer refresco y agua gasificada, sin necesidad de utilizar energía eléctrica o baterías.
Cabe mencionar que los productos de SodaStream contribuyen a disminuir el impacto ambiental generado por el uso de botellas de plástico para comercializar bebidas que van desde el agua común hasta jugos y refrescos.
Los productos de SodaStream contribuyen a disminuir el impacto ambiental generado por el uso de botellas de plástico.
De acuerdo con la empresa, ello reduce las emisiones de carbono producidas durante el transporte.
Con esta compra, Pepsi quiere sumar consumidores en un mercado que está comprando opciones de compra sustentables y menos dañinas para la salud.
Aunque también Coca-Cola está haciendo inversiones para expandirse y llegar a más mercado (recientemente compró una parte de Bodyarmor), con la adquisición de SodaStream, Pepsi aprovechó su dinero para reforzar su sustentabilidad.
Diversos analistas dicen que además esto es otro paso en la apuesta para «promover la salud y el bienestar a través de bebidas rentables, divertidas y amigables con el medioambiente».
Pepsi pagará 144 dólares por acción de SodaStream en efectivo, lo que representa una prima del 10.9% con respecto al precio del cierre de los papeles en Estados Unidos y una prima del 32% a su promedio de 30 días.
La refresquera dio a conocer que dicha operación fue aprobada por unanimidad por los directorios de ambas firmas, se espera se cierre en enero del 2019.
SodaStream fue fundada en Reino Unido en 1903, en los 70 y 80 Soda Stream era un dispositivo codiciado en las cocinas británicas ya que permitía a los clientes fabricar sus bebidas añadiendo jarabes con sabor al agua carbonatada, pero con el tiempo ha ido perdiendo popularidad a medida que los refrescos se volvieron más accesibles.
Actualmente SodaStream con sede en Israel, se centra en convertir el agua en agua gasificada para aprovechar una tendencia de consumidores más conscientes de la salud y el medioambiente.
Para la consejera delegada de Pepsico, ha sido calificada por Indra Nooyi como «unión inspirada». Además mencionó que «juntos podemos avanzar en la visión compartida de un planeta más saludable y sostenible».
Por su parte el consejero delegado, Birnbaum aseguró que Sodastraem ha basado su reciente estrategia comercial en la oferta de agua con gas de calidad a domicilio y en la disminución de la huella ambiental.
“Somos una gran alternativa a las botellas de plástico de un solo uso, que se ha mostrado perjudicial no solo para el medio ambiente, sino para también para la salud humana”.