A una semana de las elecciones intermedias en EE. UU., el presidente Joe Biden denuncia que las petroleras lucran con la guerra, y amenaza con imponer un impuesto sobre las ganancias extraordinarias. Esto si las compañías no impulsan la reducción del costo de la gasolina y aumentan la producción nacional para los consumidores estadounidenses.
Y es que las ganancias de las compañías petroleras más grandes del mundo se han disparado a casi 150 mil millones de libras esterlinas en lo que va del año. Puesto que la guerra de Rusia contra Ucrania hizo subir los precios de la energía, según estimaciones de diversos analistas.
Biden se pronuncia contra las petroleras
El tamaño de los beneficios ha reavivado las críticas de quienes acusan a las multinacionales de no hacer lo suficiente para aumentar la producción y compensar la subida de los costos del combustible. Uno de ellos es el presidente Biden, quien criticó a la industria por obtener ganancias récord mientras se niega a ayudar a bajar los precios para los estadounidenses.
«Es hora de que estas empresas dejen de especular con la guerra, cumplan con sus responsabilidades en este país y le den un respiro al pueblo estadounidense».
Joe Biden, presidente de EE. UU.
En un nuevo recorte trimestral, ExxonMobil y Chevron, dos de los gigantes energéticos de Estados Unidos, superaron los 30 mil millones de dólares en utilidades netas en el tercer trimestre, triplicándose en comparación con el mismo periodo en 2021.
En particular, el presidente Biden arremetió contra ExxonMobil, pues indica que la compañía ha usado sus ganancias récord para proporcionar a los accionistas fuertes dividendos y recompras de acciones, pero no en inversión para mejoras de producción que beneficiarían a los consumidores de gasolina.
Petroleras, únicas ganadoras de la guerra en Ucrania
Detrás de todo esto, también está que los altos precios en las gasolineras han exacerbado la inflación y están afectando la posición de Biden y los demócratas entre los votantes. Puesto que los estadounidenses han tenido problemas con los precios de la gasolina dolorosamente altos en los últimos meses.
En julio, los precios de la gasolina subieron a un promedio de 4.80 dólares por galón regular. Desde entonces, han caído a un promedio de 3.76 dólares a nivel nacional, pero la Casa Blanca dice que deberían ser más bajos, dada la caída en los precios mundiales del petróleo durante el mismo periodo.
«No puedo creer que tenga que decir esto, pero dar ganancias a los accionistas no es lo mismo que bajar los precios para las familias estadounidenses».
Joe Biden, presidente de EE. UU.
La amenaza de Biden de imponer impuestos extraordinarios a las petroleras que lucran con la guerra sigue a los llamados de los demócratas progresistas, incluidos Bernie Sanders y Elizabeth Warren. Además, a finales de octubre de 2022, el gobernador de California, Gavin Newsom, sumó su voz al llamado al Congreso para gravar las ganancias de las compañías petroleras.
«Los precios del petróleo crudo han bajado, pero las compañías de petróleo y gas han subido los precios en las gasolineras de California. Esto no cuadra».
Gavin Newsom, gobernador de California.
Instan a que gigantes energéticos paguen por ganancias extraordinarias
De continuar con el impuesto adicional sobre las ganancias extraordinarias de las petroleras, el Congreso de EE. UU. tendría que aprobar la propuesta. No obstante, algunos intentos durante este 2022 para regular la industria se han estancado en el Senado.
Sin embargo, como era de esperarse, los grupos de la industria han condenado la propuesta de Biden señalaron que sus declaraciones no son más que «politiquería». Asimismo la directora ejecutiva del Consejo Estadounidense de Exploración y Producción, Anne Bradbury, dijo que «probablemente resultaría contraproducente porque aumentaría aún más los costos de energía para las familias y empresas estadounidenses».
De igual manera, Mike Sommers, presidente y director ejecutivo del Instituto Americano del Petróleo también, refutó la amenaza de Biden: «En lugar de atribuirse el mérito de las caídas de precios y echar la culpa por los aumentos de precios, la administración de Biden debería tomarse en serio abordar el desequilibrio entre la oferta y la demanda que ha provocado precios más altos de la gasolina y ha creado desafíos energéticos a largo plazo». Puesto que las compañías petroleras no fijan los precios, sino que lo hacen los mercados mundiales de materias primas.
«Exxon Gas Station, Waterbury, CT» by JeepersMedia is licensed under CC BY 2.0.
