El presidente boliviano Evo Morales hizo hoy una cerrada defensa del medio ambiente, después de encabezar la ceremonia en la que fue entronizado como líder de los pueblos indígenas de su país.
“Estamos yendo a la destrucción del planeta. Hay que parar esta loca carrera de la destrucción del planeta en nombre del desarrollo”, dijo en la ciudadela de piedra de Tiahuanaco, 71 kilómetros al noroeste de La Paz.
Morales, un ex cultivador de la hoja de coca en el centro de Bolivia, pidió respeto a la Pachamama (madre tierra para pueblos aymaras y quechuas de los Andes).
“No es cuestión de raza. No va a ser el color de mi cara lo que te va a matar. Lo que te va a matar es el color del agua que tomas, el olor del aire que respiras. Somos miles de colores, pero un solo planeta y que la Pachamama nos ilumine”, señaló.
Además criticó que en los países con alto desarrollo exista gran cantidad de vehículos. “El papá tiene su carro, también la mamá, el hijo y la hija. Todos viven en un carro. Necesitaremos otro planeta para estacionar los carros”.
“Necesitamos volver al equilibrio, necesitamos revolución en la justicia, en el pensamiento, en la salud, en la educación, eso es Pachacuti”, manifestó Morales, en alusión a Pachacútec, quien desarrolló el imperio del Tahuantinsuyo, en el siglo XV.
El presidente ratificó que en los cinco años de su tercer gobierno profundizará su programa de vivir bien. “No planteamos volver al pasado. Se trata de una recuperación científica de lo mejor de nuestro pasado para combinarlo con la modernidad”, dijo.
Morales recibió el saludo de autoridades y representantes de 40 países y decenas de organizaciones sociales en la escalinata de la Puerta del Sol de la primera ciudadela preincaica en Sudamérica.
Vistió un traje ceremonial, similar a una toga, llamado unku, tejido de lana de vicuña y adornado con un pectoral de una aleación de oro, cobre y plata.
También el chu’cu, una gorra de cuatro puntas, ornada de oro, que representa los cuatro suyos o regiones del Tawantinsuyo y los cuatro puntos cardinales.
La ceremonia se desarrolló en el centro ritual de Tiwanaku, que era capital de una de las culturas más longevas de América del Sur, desde el 400 a.C. al 1172 d.C.
La ceremonia oficial de investidura del tercer mandato consecutivo de Morales, de 55 años de edad, se realizará en el Congreso boliviano en La Paz el jueves, al que asistirán mandatarios y delegaciones de unos 40 países.
Fuente: La Jornada
