Incluiría la violencia doméstica, las agresiones sexuales, el acoso, los matrimonios forzados, los llamados crímenes de honor y las mutilaciones sexuales femeninas.
La Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa aprobó hoy recomendar al Comité de Ministros de la organización que elabore un convenio para combatir «las formas severas y las más extendidas de violencia contra las mujeres» .El convenio incluiría la violencia doméstica, las agresiones sexuales, el acoso, los matrimonios forzados, los llamados «crímenes de honor» y las mutilaciones sexuales femeninas.
La recomendación, que fue aprobada por una unanimidad de 45 votos, elogia la campaña del Consejo de Europa «Stop a la violencia doméstica contra las mujeres» , que fue lanzada en Madrid en noviembre de 2006 y clausurada el pasado mes de junio.
La asamblea también aprobó por unanimidad una resolución en la que se proponen acciones de sensibilización para los parlamentarios y para el gran público, así como una mayor implicación de los hombres en la lucha contra la violencia de género.
El texto incide en la necesidad de que se cumplan los estándares mínimos en esta cuestión: penalización de la violencia doméstica, que la violencia entre ex parejas sea considerado como un agravante, la creación de centros de acogida de urgencia, así como medidas de alejamiento para el cónyuge violento.
Completan el listado de siete medidas a cumplir por los Estados el acceso efectivo a un tribunal y la protección para las víctimas, prever un presupuesto económico suficiente para poner en marcha la ley y el seguimiento de la aplicación de la misma.
En este sentido, el ponente del informe, el legislador portugués José Mendes Bota, lamentó que haya que ir hasta Canadá para buscar un país en el que se cumplan todos los compromisos citados, «algo que no ocurre en Europa» .
Según el informe «Combatir la violencia contra las mujeres: por un convenio del Consejo de Europa» , 80 millones están afectadas en el continente europeo por «la lacra de la violencia doméstica» .
Mendes Bota expresó su preocupación por el hecho de que en un tercio de los 47 Estados miembros del Consejo «no se considera un crimen la violencia doméstica» , mientras que sólo un 17 por ciento de los países pueden ofrecer un lugar seguro de acogida a las víctimas.
Según el redactor del informe, esta es «una tragedia que no hace distinciones» , ya que «no hay fronteras geográficas ni sociales para este flagelo» .
Fuente: El Universal
