La organización El Poder del Consumidor (EPC) exigió ayer a la secretaria de Educación Pública, Josefina Vázquez Mota, que rectifique su postura y prohíba la venta de alimentos chatarra en todas las escuelas del país.
Entrevistado en el marco de una protesta frente a la sede de la SEP, el director del organismo, Alejandro Calvillo, sostuvo que todo acto al interior de los planteles es educación, por lo que, al permitir el consumo de estos productos -dijo-, se contribuye con el ambiente obesigénico que permea en las escuelas y se atenta contra la salud de los niños y niñas.
El pasado 20 de agosto, Vázquez Mota señaló que la administración federal no cree en la política de la prohibición, sino de la formación para lograr acabar con la epidemia de sobrepeso y obesidad, por lo que descartó que los alimentos chatarra pudieran ser expulsados de las instituciones educativas.
Mientras, en el Club de Industriales, el Secretario de Salud, José Ángel Córdova, y el Procurador Federal del Consumidor, Antonio Morales de la Peña, atestiguaron la firma del Código de Autorregulación de Publicidad de Alimentos y Bebidas Dirigido al Público Infantil (Código PABI).
El código entrará en vigor el 1 de enero y establece que las empresas firmantes se comprometen a promover estilos de vida saludables; a no incitar al sobre consumo, y a no engañar al público infantil sobre los beneficios del consumo de un alimento o bebida, tales como obtención de fuerza, estatus o popularidad.
Reforma, Nacional, p. 10, 23 de septiembre de 2008