Ben & Jerry’s nació en 1978, después de que Ben Cohen y Jerry Greenfield tomaran un curso por correspondencia sobre heladerías. Sin embargo, la base de la compañía fue siempre la ideología de sus fundadores, quienes estaban convencidos de que el éxito dependería de lograr sus objetivos económicos, al mismo tiempo que los de producto, ambientales y sociales.
Años antes de que existiera el término Responsabilidad Social Empresarial , los jóvenes dueños de una pequeña heladería en Vermont ya tenían en cuenta la influencia de su negocio en la sociedad y el medio ambiente. En ese momento, su cultura corporativa fue llamada «antistablishment».
Además de comprometerse con la calidad de su producto, usando solamente insumos naturales y orgánicos, Cohen y Greenberg reciclaban envases y se involucraban con los procesos de sus proveedores. Estas acciones los diferenciaron de sus competidores (entre ellos, el gigante Hagen Dazs) y les permitieron ser conocidos como activistas de causas sociales y ambientales.
El crecimiento de la empresa trajo nuevos retos. Por ejemplo, fue difícil sostener su política 5-1, en la que un ejecutivo de alto nivel solamente podía ganar 5 veces más que el empleado con el sueldo más bajo. Para los fundadores, era muy importante que quienes trabajaban con ellos compartieran sus valores, pero en la práctica tuvieron que modificar esta política, ampliándola a un 7-1.
La historia de Ben & Jerry’s es una muestra de que la RSE debe estar íntimamente ligada a todos los procesos de una institución. No se trata simplemente de agregar prácticas ecológicas o sociales, sino de asegurarse de que se vivan como parte del funcionamiento diario.
En la actualidad, Greenberg y Cohen se han jubilado, y vendieron la heladería al gigante Unilever. Sin embargo, los productos siguen siendo orgánicos, una porción de las ventas se destina a la Fundación Ben & Jerry’s y sigue siendo un referente de RSE.
Otro factor muy importante es la flexibilidad y habilidad para cambiar con el tiempo. Una empresa pequeña que se convierte en una cadena, como Ben & Jerry’s, tiene que ajustar sus políticas a los cambios sociales y económicos, pero siempre basándose en la Visión, Misión y Valores originales.