La Secretaría del Trabajo propondrá al Congreso de la Unión castigar con hasta 5 mil salarios mínimos a los patrones que acosen o discriminen a sus trabajadores.
El titular de la dependencia, Javier Lozano, indicó ayer que actualmente la Ley Federal del Trabajo fija una multa máxima de 315 salarios mínimos por esas prácticas, lo que, consideró, resulta «muy barato».
«Estamos planteando que se imponga una multa de 250 a 5 mil veces el salario mínimo general al patrón que cometa cualquier acto o conducta discriminatoria en el centro de trabajo o incurra en actos de hostigamiento sexual en contra de sus trabajadores», señaló en el marco de la entrega del distintivo «Gilberto Rincón Gallardo» a 32 empresas.