Una de las métricas que se usan para conocer el estado de la equidad de género en los países es la existencia y el alcance de permisos de maternidad que permitan a las nuevas madres dejar su trabajo para cuidar a sus hijos, seguras de que su puesto estará ahí a su regreso. Esta política es ya una realidad en todos los países de la OCDE, exceptuando a Estados Unidos.
Sin embargo, a la luz de cifras que hablan sobre la inequidad tanto en México como de forma global, queda claro que el permiso de maternidad no es suficiente para garantizar a las mujeres que también son madres un trato más justo en sus lugares de trababjo. Como menciona un artículo reciente de la CEO y autora Avivah Wittenberg-Cox, publicado en Harvard Business Review: «Muchos países y empresas parecen pensar todavía que la mayoría de los niños tienen solo madres.» Es decir, sus políticas para garantizar el bienestar de los niños de enfocan en ofrecer pemisos, horarios flexibles y otras facilidades solamente a las madres, olvidando a los padres.
Existen países y empresas que han tratado de revertir esto. Por ejemplo, desde 1974 en Suecia el permiso es el mismo para padres y madres, quienes pueden aprovechar dos meses pagados cada uno. En Noruega, Alemania, Italia, Reino Unido, República Checa y Corea del Norte, entre otros países, existen leyes similares, mientras que en México y Estados Unidos las empresas o dependencias de gobierno pueden ofrecer esta prestación como un extra.
Por desgracia, aunque existan las prestaciones o leyes, todavía algunos padres reciben críticas por tomar los días que se les ofrecen, como fue el caso del beisbolista Daniel Murphy el año pasado, quien se perdió el partido inaugural de su equipo por el nacimiento de su hijo.
En su artículo para Harvard Business Review, Wittenberg-Cox analiza la nueva política de la empresa Vodafone, que ha sido aplaudida por ofrecer 16 semanas de permiso pagado a madres, así como una reducción de horarios de trabajo en los primeros meses, sin cambios en el sueldo. Esto es sin duda buena noticia, pero la comunicación se ha dirigido solamente a madres.
«El reto para las mujeres es que esto refuerza los roles estereotípicos de género: las mujeres son madres, los hombres trabajan (…) Pero en las nuevas generaciones, incluyendo a los hombres, son más centradas en la familia que las anteriores. Ellos quieren pasar tiempo con sus hijas y muchas mujeres quieren pasar tiempo en la oficina.», dice Wittenberg-Cox, añadiendo que las empresas que han comprendido esto son startups dirigidas a millenials, como Facebook o Reddit, que ofrecen 17 semanas pagadas a los nuevos padres.
Nadie niega que la política de Vodafone es buena para sus trabajadores, pero tal vez es momento de esperar menos de lo mínimo de las compañías, exigiendo que demuestren su compromiso con la equidad yendo un poco más allá y reconociendo que los padres también juegan un papel importante en el cuidado de sus hijos.
