En los últimos meses se ha destapado una decena de redes de corrupción que involucran a instituciones gubernamentales como la iniciativa privada.
El más reciente caso es la transferencia de 3.1 millones de dólares que la constructora brasileña Odebrecht realizó en 2012 a una empresa ubicada en Islas Vírgenes, ligada con Emilio Lozoya Austin, exdirector general de Pemex y quien en ese entonces era Coordinador Internacional de la campaña del ahora presidente Enrique Peña Nieto.
El periódico estadounidense The New York Times publicó en su primera plana que el presidente Enrique Peña Nieto pidió, durante una reunión que tuvo con distintos personajes prominentes, al empresario mexicano Claudio X. González Laporte que su hijo que fuera menos crítico con su gobierno.
En el encuentro el mandatario dijo a González Laporte «tu hijo debería dejar de ser tan crítico con el Gobierno. La sociedad civil no debe pasar tato tiempo hablado de corrupción».
El empresario respondió: «Estoy orgulloso de mi hijo y del trabajo que está haciendo».
Y es que Claudio X. González Guajardo, hijo del hombre de negocios, fundó este 2017 la Asociación Civil Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI), desde la cual ha destapado desde su apertura al menos una decena de redes de corrupción que involucran tanto a instituciones gubernamentales como a la iniciativa privada.
González Laporte, es uno de los empresarios más influyentes en el país y es muy cercano al expresidente Carlos Salinas de Gortari, además es miembro del Consejo Mexicano de Hombres de Negocios y hace poco fue miembro del consejo de administración de Televisa.
Por su parte, señala el diario, la Presidencia de la República negó que Peña Nieto estuviera presionado directamente e González Guajardo, sino que simplemente hizo un comentario de manera general ante su audiencia y a la que invitó a enfocarse tanto en los errores como en los logros de su gobierno, destaca la publicación.
Además de esta investigación, MCCI también también ha documentado probables casos de corrupción que involucran a instituciones como la Comisión Federal de Electricidad (CFE) o Caminos y Puentes Federales (Capufe), así como también movimientos fraudulentos realizados por ex gobernadores como Javier Duarte o Roberto Borge, y ex funcionarios como Jesús Murillo Karam.