LAS COMPAÑÍAS DEBEN VOLCARSE A LAS SOLUCIONES PARA GENERAR SU PROPIA ENERGÍA, LA CUAL TAMBIÉN PODRÍAN COMERCIALIZAR, PUBLICA THE WASHINGTON POST
El último informe de cambio climático del Panel Intergubernamental de la ONU sobre el Cambio Climático no revela noticias gratas, los intentos de reducir las emisiones de carbono en la última década han prácticamente fracasado y si los gobiernos de todo el mundo no encuentran una manera de reducir la dependencia de los combustibles fósiles para el año 2050, nos enfrentaremos a un sombrío futuro, informó el diario The Washington Post en su edición online.
Según los científicos tras el informe, los países deben reducir sus emisiones de energía en un 40% a 70% para el año 2050, y en su totalidad para el año 2100, con el fin de evitar llegar al apocalipsis del cambio climático.
Para lograrlo se propone una idea innovadora, que la empresas se comprometan a una transformación de energía cero para 2050, en términos simples, las compañías deben reducir su consumo de energía neta a cero, produciendo de la que consumen.
Esto representa un desafío para las empresas, pues tendrán que ir mucho más allá de la reducción de su huella de carbono, tendrán que empezar a pensar no sólo en la forma en que consumen energía, sino también la forma en que la producen.
La firma sueca de muebles y accesorios para el hogar, Ikea, se ha comprometido a hacer la transición a empresa de energía cero para el año 2020.
A la fecha, la compañía ha invertido dos mil millones de dólares en proyectos de energía renovable, incluyendo un parque eólico de 110 millas al sur de Chicago que planea funcionar a partir de 2015, con lo suministrará el 165% de las necesidades eléctricas de la compañía para sus operaciones en Estados Unidos y hasta el 18% de las necesidades mundiales de electricidad de la firma.
Las cifras del más reciente informe de sostenibilidad de la empresa apunta a que llegarán a su meta, pues en 2013 las energías renovables representaron el 37% de las necesidades totales de energía de la compañía.
Lo que hace posible el concepto de empresa de energía cero es otro concepto, que las compañías pueden comprar y vender la energía que no utilicen en la misma forma en que comercializan sus productos.
Ikea, junto con otras cuatro empresas – VF Corporation , Marte, Sprint y Jones Lang LaSalle – hablaron con los legisladores del Congreso de los Estados Unidos en el marco del Grupo de Trabajo Bicameral sobre el Cambio Climático en Washington, acerca de las medidas concretas que pueden tomar para mitigar este fenómeno global.
El grupo de empresas se adhirió a la coalición Empresas por Políticas Climáticas y Energéticas ( BICEP, por sus siglas en inglés).
Aunque poner una fecha límite para convertirse en empresas de energía cero es algo que no agradaría a muchas firmas estadounidenses, sí podrían empezar a ver los beneficios económicos tras la transformación para dar el gran paso.
Fuente: Mundo Ejecutivo Express
