A pesar de que no existe una receta o pócima mágica que nos ayude a combatir el cambio climático fácilmente o a limpiar el planeta de todas nuestras malas decisiones, sí existen campañas e iniciativas poderosas que pueden hacer la diferencia y motivarlos a generar grandes cambios a partir de pequeñas y constantes acciones.
Como en el caso de los ecologistas expertos de Los Ángeles, quienes decidieron pintar las calles de blanco por una buena y sostenible causa.
Pintar las calles para, ¿combatir el cambio climático fácilmente?
¡Así es! Los ecologistas de esta ciudad, decidieron pintar las calles de blanco con el objetivo de combatir el cambio climático y para controlar la temperatura y energía que es absorbida por el pavimento.
Para hacerlo, decidieron pintar las calles con el blanco grisáceo de “cool pavement”, o pavimento fresco, que ayuda a bajar a temperatura del suelo de manera significativa.
«El calor aquí, sobre la superficie negra… es de 42°, 43°C en este momento. Y sobre la superficie ya seca del otro lado, a pesar de tener una sola capa de blanco y necesitar todavía una segunda, es de 36°C. La compañía que proporciona el recubrimiento, durante una demostración a la prensa. Una diferencia de temperatura de 6° a 7°C», sostiene Jeff Luzar, vicepresidente de Guartop
De acuerdo con Greg Spotts, Los Ángeles es la primera ciudad que puso a prueba este pavimento sobre una calle pública pero anteriormente se ha utilizado en aparcamientos.
«Esperamos que otras ciudades se inspiren y que los fabricantes se animen a desarrollar nuevos productos», afirma.
Y… ¿de verdad combate el cambio climático?
Un análisis de la Universidad Estatal de Arizona en 2013 compartió que un cambio en la temperatura de la superficie tiene sólo efectos limitados sobre las capas de aire superpuestas, por lo que los beneficios generales de los pavimentos y techos reflectantes pueden ser menores de lo esperado.
No obstante, los responsable de esta iniciativa señalan que el «cool pavement» supone una promesa real en la lucha contra el calentamiento global en las ciudades donde el asfalto y la concentración demográfica y vehicular crean un efecto conocido como «isla de calor» (heat island).
Today the BSS @LAGreatStreets crew installed cool pavement coating on 70th St in south LA
10 deg cooler!@mhdcd8 pic.twitter.com/eZlqcg2sHO— LA Street Services (@BSSLosAngeles) 18 de junio de 2017
Entre otras de las ventajas que resaltan los autores de “cool paviment” es que permite tener una menor dependencia de los sistemas de climatización, lo que significa menos emisiones de gases de efecto invernadero.
Alan Barreca, profesor de ciencias ambientales en la UCLA subraya los sistemas de climatización nos ayudan a protegernos del calor pero que no todos tienen los ingresos para adquirirlos. En cambio el beneficio que tiene pavimento fresco es que lo percibe todo el mundo.
«El pavimento que refleja el calor del sol es una de las estrategias, como también los techos refractarios o la siembra de árboles, que las ciudades pueden aplicar para reducir las temperaturas urbanas», estimó.
También se planea aplicar esta tecnología en techos y otras superficies que absorben y reflejan el calor. Además de sembrar árboles y motivar a los vecinos a cambiar el tono de su casa por uno más blanco que también fomenta el ahorro de energía por las noches pero, ¿y realmente ha funcionado?
Resultados hasta hoy…
Este esfuerzo ecológico cuesta cerca de unos 40 mil dólares por milla y ayuda a disminuir la absorción de los rayos solares con el revestimiento que la pintura ofrece.
De acuerdo con Bob Blumenfield, hasta el momento, las pruebas piloto mostraron una reducción en las temperaturas de más de 10 grados Farenheit.
Los Angeles is painting its streets white to keep the city cool. pic.twitter.com/5nHI65StX1
— Vladimer Botsvadze (@VladoBotsvadze) 17 de abril de 2018
“Estamos usando está innovación técnica para ahorrar energía, mitigar la polución del aire, las emisiones de gases de efecto invernadero y la escasez de agua de calidad”, anotó en una comunicación enviada EFE la oficina de Spotts.
Mientras que un estudio comprobó que si las ciudades más grandes del planeta añadieran esta iniciativa e invitaran a los ciudadanos a cambiar los techos oscuros de las viviendas por otros de tonalidades blancas y las calles por concreto y otro material de color claro se podrían compensar 44 mil millones de toneladas métricas de gases de efecto invernadero.
Sin embargo, para algunos habitantes este pavimento es una mala idea ya que los jóvenes ensuciarán muy fácil el pavimento todos los viernes por la noche o significa que pronto el gobierno prohibirá que se utilice ropa negra.