En 2012 Australia se convirtió en el primer país en eliminar la marca de todas las cajetillas de cigarros y sustituir por completo la identidad con imágenes que reflejaban los daños que éstos provocan en la salud de los fumadores. Posteriormente Irlanda se convirtió en el primer país europeo en eliminar la publicidad del tabaco. Ahora cada vez más países buscan imitar esta medida para combatir el consumo del tabaco, pero ¿qué es lo que la hace tan atractiva?
La iniciativa se basa en el efecto psicológico de atracción que el diseño de las marcas ejerce sobre el consumidor, especialmente en los niños y jóvenes. Las advertencias sanitarias que se introdujeron inicialmente abarcando un porcentaje del espacio total del empaque, tuvieron un impacto poco significativo, por lo que ahora se busca desaparecer el atractivo visual de la marca por completo. La pregunta es ¿realmente tendrá esto algún efecto en el consumo de tabaco?
La implementación de esta medida aún es muy joven, hasta ahora únicamente Australia puede contar con experiencia de un año, por lo que resulta difícil predecir los resultados de la misma. Sin embargo, ahora Reino Unido parece confiar en que desaparecer las marcas de los empaques tendrá un impacto significativo.
Desde luego las marcas han lamentado la restricción, y no sólo por el hecho de que ésta representa eliminar por completo la identidad de la empresa en sus propios productos, sino también porque el hacerlo facilitaría la proliferación del mercado ilegal.
Sin embargo el gobierno británico parece estar seguro de que el riesgo vale la pena a cambio de hacer un esfuerzo por disminuir la cifra de aproximadamente 600 jóvenes que se inician a diario en el consumo de tabaco. ¿Será que el atractivo visual de la marca realmente contribuye a la su iniciación en el consumo?
Realizada por la organización británica Cancer Research UK, la campaña ‘The answer is plain’ muestra las reacciones de los niños ante la imagen de las cajetillas, mismas que suelen estar relacionadas con estatus y elegancia.
Así, la medida no pretende que las personas que fuman abandonen el hábito, ya que este sector terminó por acostumbrarse a las primeras advertencias visuales ignorándolas e incluso cubriéndolas. Sin embargo erradicar el atractivo visual que las marcas pueden tener en los niños probablemente contribuirá a disminuir el número de jóvenes que se inician en el consumo de tabaco a temprana edad y significará todo un avance en materia de salud pública.
Me parece que ha sido una de las iniciativas que pudiera rendir mas frutos, desafortunadamente el porcentaje de la población que ya fuma y ya es propénsa a la enfermedad no puede hacer nada, pero es increíble el impacto que puede tener con los niños. Ojalá esto se implemente en México, aunque lo dudo. sobre todo por la falta de cultura en el cancer que se tiene.