Seguramente se te ocurren más de diez razones por las que una compañía podría decidir poner fin a su relación con un colaborador determinado, y estás en lo cierto si crees que éstas pueden ir desde lo que pareciera una inocente publicación en las redes sociales, hasta grandes escándalos relacionados con corrupción o acoso.
Sin embargo, tras casi veinte años dedicándose a entrenar líderes corporativos el fundador de Leadership From the Core, Marcel Schwantes, ha identificado algunas actitudes que jamás habrías pensado que podrían costarte tu empleo, sin embargo podrían estar muy cerca de obligarte a desempolvar tu curriculum.
La razón por la que esta posibilidad no había rondado tu cabeza, es que todas estas actitudes tienen un elemento en común: el perfeccionismo. Leíste bien, la constante búsqueda de perfeccionismo podría afectar tu carrera más de lo que crees, ya que con frecuencia se convierte en una obsesión tóxica que puede despojarte de tu alegría, tu vitalidad y tu capacidad para trabajar en equipo, aniquilando así rápidamente tu productividad.
Algunos de estos patrones no son sencillos de reconocer en ti mismo, pero resultan bastante autodestructivos si los practicas con frecuencia, por lo que si lo que quieres es generar un mejor ambiente de trabajo a tu alrededor es importante que mantengas los ojos bien abiertos para notar si eres un perfeccionista tóxico, ya que las empresas están cada vez más preocupadas por evitar a estos elementos entre sus filas.
Aquí diez elementos que Schwantes comparte para ayudarte a averiguar si eres uno de los colaboradores que podría perder su trabajo por ser dañino para la productividad de sus compañeros.
Es horrible tratar de leer en esos gif animados.