Un nuevo reporte publicado por The Bank of England (BoE) señala sobre las posibles implicaciones macroeconómicas del cambio climático. Si bien, se centra en el caso particular de Reino Unido, los alcances del estudio permiten vislumbrar las repercusiones climáticas que otros países padecen.
Aún cuando por muchos años las advertencias de elevar la temperatura del planeta han sido objeto de incredulidad, e incluso hay quienes lo señalan las afirmaciones como «exageradas», los cambios de temperatura en la Tierra están sucediendo a un ritmo que esta afectando a la macroeconomía tanto en horizontes más cortos como a largo plazo.
Implicaciones macroeconómicas del cambio climático
La macroeconomía es la rama de la Economía que estudia el comportamiento y desempeño de un sistema económico en su conjunto. Se centra en los cambios agregados, como el desempleo, la tasa de crecimiento, el producto interno bruto y la inflación, según The Economic Times.
Por ende, esta disciplina se centra en el análisis todos los indicadores agregados y los factores microeconómicos que influyen en la economía. Por ejemplo, el gobierno y las corporaciones utilizan modelos macroeconómicos para ayudar en la formulación de políticas y estrategias.
En este contexto, el informe muestra que dado que el cambio climático influye en variables clave como la producción y la inflación, posiblemente será importante para los responsables de la política monetaria, como el Comité de Política Monetaria (MPC, por sus siglas en inglés) en Reino Unido —responsable de tomar decisiones sobre la tasa bancaria, con el objetivo principal de mantener la estabilidad de precios teniendo en cuenta el crecimiento del país—.
Debido a lo anterior, el informe del BoE aborda las implicaciones macroeconómicas del cambio climático, como el clima extremo o la transición a una economía neta cero (con una tasa de inversión menos intensiva en carbono) y lo que significarán en el futuro.
Incertidumbre en el panorama macroeconómica
Del mismo modo, el reporte apunta que, sin duda, todos estos cambios en los modelos económicos —derivados de la consciencia climática y sus preocupaciones— se desenvuelven en un panorama nuevo, lleno de preguntas y aún en investigación.
Esto refleja los nuevos desafíos analíticos asociados con el cambio climático, incluidos los relacionados con el modelado macroeconómico y la calidad y disponibilidad de los datos para la toma de decisiones en la economía de los países, tales como fomentar el empleo y mantener una balanza de pagos sostenible y equilibrada.
Por si fuera poco, abundan las dimensiones de incertidumbre, sobre todo en la evolución de los efectos físicos del cambio climático y las respuestas políticas de los gobiernos en los próximos años y décadas.
Reino Unido, implicaciones macroeconómicas del cambio climático
Como señalamos en un principio, el análisis aquí descrito es un enfoque particular para el Reino Unido, entendiendo esto, se abordan algunas implicaciones macroeconómicas del cambio climático en dicha nación. Primero hay que resaltar que su política monetaria de alcanzar el objetivo de inflación del 2% tiene sentido en el actual contexto de volatilidad y crisis energética.
Para alcanzar ese objetivo, incluidos los efectos indirectos del resto del mundo, el Comité de Política Monetaria (MPC) ajusta sus instrumentos. Empleando dos medidas principales:
- Cambiar la tasa de interés que el Banco de Inglaterra cobra a los bancos comerciales por tomar prestado (‘Tasa Bancaria’).
- Modificar el stock de activos que el Banco mantiene en su balance como resultado de compras directas («flexibilización/reducción cuantitativa»).
Daños a corto y largo plazo en la economía
Al evaluar estos ajustes en su política económica, el MPC observa qué tan factible es que se desarrolle la economía durante los próximos dos o tres años, considerando el horizonte en el que la política monetaria puede llevar la inflación de manera sostenible en línea con su objetivo de 2%.
Lo que resalta el análisis hecho por el The Bank of England es cómo, a menudo, los llamados shocks afectarán las perspectivas de la economía durante ese periodo, a veces materialmente. El fuerte y significativo aumento de los precios domésticos y mayoristas de la energía desde la invasión rusa de Ucrania es un ejemplo de ello.
Asimismo, el MPC monitorea y evalúa desarrollos a más largo plazo, ya veces más graduales, para comprender los cambios económicos estructurales que están ocurriendo en la economía a lo largo de varios años. Muestra de esto es la mayor integración de las economías emergentes en el sistema mundial a lo largo de una serie de dimensiones desde principios de la década del 2000.
Cambio climático trae incertidumbre
De acuerdo con el informe, el cambio climático comprende otro conjunto de shocks económicos y cambios estructurales que los responsables de la política monetaria deben evaluar y monitorear para lograr la meta de inflación.
Sin embargo, el cambio climático presenta nuevos desafíos para los responsables de la política monetaria en varios aspectos, incluida su dimensión global, su horizonte temporal y el grado de incertidumbre sobre la política climática y la forma en que responderán los agentes económicos. Esto es particularmente así, dada la naturaleza no lineal de las afectaciones ambientales, que conduce a efectos irreversibles («puntos de inflexión»).
Por ejemplo, una mayor gravedad y/o frecuencia de los fenómenos meteorológicos extremos en el país y en el extranjero podría provocar interrupciones en el suministro y un aumento de algunos precios, incluidos los de los alimentos.
Además, en los próximos años y décadas, la legislación del Reino Unido, si quiere lograr emisiones netas cero para 2050 (Ley de Cambio Climático de 2008, modificado en 2019), necesitará modificaciones en todas las partes de la economía, desde la generación de energía, la forma de transporte hasta la forma en que se construyen y mantienen calientes los hogares.
El desafío global para asegurar transición económica sostenible
Con esto en mente, es claro que la política monetaria no puede resolver por sí sola las implicaciones que trae el calentamiento del planeta, pero este último si puede incidir en las condiciones económicas más relevantes para los responsables de la política monetaria.
Lo anterior implica que la mayor contribución que puede hacer la política monetaria para facilitar la transición a la economía verde es asegurar la estabilidad de precios y mantener la credibilidad del régimen monetario durante la transición.
El análisis de BoE explora cómo los impactos físicos del cambio climático y la transición a cero neto podrían afectar la economía y, por lo tanto, ser importantes para la política monetaria. Por ello, primero aborda los efectos macroeconómicos de los impactos físicos y de transición. Posteriormente, considera lo que los cambios a largo plazo asociados con el clima podrían significar para el panorama macroeconómico dentro del cual opera la política monetaria. Por último, proporciona una evaluación inicial de algunas posibles consideraciones, antes de brindar una conclusión general.
El cambio climático cambiará la forma de la economía mundial
Los resultados que se proporcionan son un complemento al extenso trabajo realizado en los últimos años por el The Bank of England y otras instituciones centradas en comprender los riesgos financieros del cambio climático y la transición a una economía neta cero.
Aunado a ello, contribuye a los debates recientes, incluso en la literatura económica, de la Red de Bancos Centrales y Supervisores para la Ecologización del Sistema Financiero (NGFS), sobre los impactos potenciales del cambio climático en la macroeconomía y las implicaciones para la política monetaria.
Vale la pena indicar que muchas de las preguntas en esta área son nuevas, abiertas y merecen una mayor investigación. Eso refleja los nuevos desafíos analíticos, incluidas las implicaciones macroeconómicas del cambio climático. Además, hay muchas dimensiones de incertidumbre, sobre todo en relación con la evolución de los efectos físicos del cambio climático y las respuestas políticas de los gobiernos en los próximos años y décadas.
Si requieres más información, aquí puedes consultar el informe completo.