En los últimos años, la arquitectura ecológica y las prácticas de construcción sostenible están cobrando mayor impulso a nivel mundial, sobre todo ahora que se sabe que el espacio que habitamos y las futuras edificaciones jugarán un papel muy importante para hacer frente a la pandemia y la adaptación hacia la nueva normalidad.
La arquitectura ecológica y las prácticas de construcción sustentable no solo preservan el valor ambiental y los recursos escasos, sino que muchas de ellas también ofrecen ventajas económicas y sostenibles.
De hecho una encuesta encontró que más de 2.000 contratistas, constructores y desarrolladores internacionales dijeron que esperan construir más del 50% de sus proyectos como un edificio ecológico para 2021. Veamos el motivo.
El futuro está en las prácticas de la construcción sostenible
La arquitectura sustentable hace referencia a aquellos proyectos de construcción sostenible que incorpora materiales naturales, dejando de lado el uso de sustancias tóxicas en la fabricación de los materiales de construcción, así como limitar el impacto negativo del hábitat humano en el medio ambiente y reducir el consumo de energía.
Este tipo de construcciones son pensadas en ofrecer un hábitat inteligente y amigable con la salud de los habitantes y el medio ambiente. Las edificaciones se planean para que tengan la capacidad de adaptarse al entorno natural.
Y ahora que el World Green Building Council (WGBC), compartió que los edificios verdes van a desempeñar un papel fundamental en la prevención de la COVID-19, las apuestas hacia estas edificaciones y sus prácticas de construcción sostenible han aumentado iniciando por…
1. Edificios Net-Zero
Muchas personas involucradas con la construcción sostenible tienen como objetivo construir edificios cuyo consumo de energía sea aproximadamente igual a su producción de energía.
Otro de los propósitos de este tipo de proyectos de construcción, es reducir las emisiones de carbono, el consumo de agua y los residuos sólidos transportados a los vertederos.
Los proyectos pensados en ser cero impacto se enfocan en encontrar formas de generar energía renovable dentro y fuera del sitio.
Las tácticas populares de generación en el sitio incluyen turbinas eólicas, calentamiento solar de agua y energía fotovoltaica. Las opciones fuera del sitio incluyen parques eólicos a gran escala, plantas solares, plantas geotérmicas e instalaciones hidroeléctricas.
2. Resiliencia climática
La preocupación sobre el cambio climático y sus efectos, ha motivado a la industria de la construcción a tomar medidas que permitan resistir patrones climáticos extremos y desastres naturales.
Si bien muchas ciudades costeras han tomado medidas para relajar sus códigos de construcción, los desarrolladores todavía están buscando métodos para ir más allá, con el objetivo de construir marcos más fuertes y aumentar la resistencia al clima para mitigar los daños climáticos.
3. Certificación Green Star
La certificación Green Star promueve a nivel mundial diseños de edificios integrados que reducen el impacto ambiental.
Cuando un contratista pasa por el proceso de certificación, su edificio o proyecto recibirá una calificación de un panel independiente de expertos en sostenibilidad. Esta calificación puede verificar que un edificio o proyecto comunitario es un esfuerzo sostenible.
La calificación que recibe un proyecto proviene de nueve categorías, en donde se evalúa desde el diseño hasta la construcción del edificio y cómo opera. Cada categoría evalúa la sostenibilidad de un proyecto y determina posibles optimizaciones.
4. Certificación LEED
Hoy en día, este sistema de clasificación LEED es el más utilizado a nivel mundial y se encarga de certificar cerca o más de 1,85 millones de pies cuadrados de construcción cada día.
Cualquiera puede afirmar que su edificio es sostenible. Sin embargo, una certificación LEED responsabiliza a los constructores a través de un sistema de calificación estructurado y basado en puntos.
Además de que contar con esta certificación LEED atrae muchos beneficios, como brindar credibilidad de terceros a la capacidad de una organización para desarrollar un proyecto sostenible.
El proceso de certificación ofrece asesoramiento sobre el uso de materiales para interiores y exteriores. También permite reducir los costos operativos al fomentar el uso de fuentes de energía renovables y reducidas.
5. Sistemas de energía distribuida
Un sistema de energía distribuida permite gestionar de mejor manera la energía que se utiliza en el edificio. Esto lo hace mediante el uso de sensores, medidores y actuadores.
Muchos desarrolladores decidieron integrar este modelo en sus diseños sostenibles para aprovechar la gran cantidad de beneficios, como:
- Costos operativos reducidos.
- Fiabilidad energética mejorada.
- Huella de carbono reducida.
- Fuentes de ingresos adicionales.
6. Certificación EDGE
La certificación de EDGE significa Excelencia en Diseño para Mayores Eficiencias, y tiene como objetivo aumentar la eficiencia de la construcción en términos de energía, agua, materiales de construcción y residuos.
Comenzar con EDGE es muy simple para los desarrolladores, comenzando con un programa de software descargable que les permite determinar la combinación ideal de estrategias de construcción para obtener el mejor retorno de su inversión. Una vez finalizado un proyecto, ya sea un hogar, una oficina, un hospital o un almacén, un panel independiente de expertos lo auditará para determinar si cumple con los estándares requeridos.
Actualmente operan en más de 130 países, la certificación EDGE requiere que los desarrolladores se comprometan a reducir al menos un 20% el uso de energía y agua en comparación con un edificio estándar.
7. Materiales de construcción alternativos
Las actividades de edificación y construcción consumen 3.000 millones de toneladas de materia prima cada año en todo el mundo. Esta dependencia hacia el uso de materiales no renovables ha tenido un impacto duradero en el medio ambiente y en la cantidad de recursos disponibles, lo que significa que los desarrolladores están buscando materiales alternativos para construir.
Durante 2020 se ha visto un aumento en el número de constructores que utilizan métodos más sostenibles al elegir materiales alternativos como:
- Grasscrete: una técnica de capas de pisos de concreto de una manera que permite que la hierba y la flora crezcan, creando un biofiltro natural y mejorando la absorción de agua de lluvia.
- Bambú: un material rentable, de rápido crecimiento y fácil de cosechar, lo que lo convierte en una fuente de material sostenible.
- Plástico reciclado: con una vida útil de 30 a 50 años, el plástico es un material de construcción duradero y duradero.
- Madera: el uso de madera absorbe dióxido de carbono y requiere métodos de procesamiento que consumen menos energía.
- Hempcrete: hecho de madera de cáñamo, agua y cal, este material sostenible es duradero y duradero.
La industria de la construcción predice que estas nuevas tendencias aumentarán la conciencia global sobre el desarrollo verde en los próximos años y conducirá a iniciativas sostenibles más eficientes y desarrolladas.