Seguridad energética, sustentabilidad ambiental y eficiencia económica y productiva son los tres ejes rectores de la Estrategia Nacional de Energía 2010-2024, que el gobierno federal envió al Congreso de la Unión.
El documento, de 72 páginas y que deberá ser ratificado por los legisladores en un plazo máximo de 30 días hábiles, señala que los objetivos de la estrategia establecen la dirección que seguirá el sector energético en la transición hacia una operación segura, eficiente y sustentable que responda a las necesidades energéticas y de crecimiento económico y desarrollo social del país.
Para el 2024 se propone alcanzar diversas metas, como son ubicar la producción de petróleo crudo en 3.3 millones de barriles diarios, la restitución de reservas probadas 1P en un 100 por ciento, tener un margen de reserva para suministro de gasolina de 15 por ciento, un margen de reserva de electricidad de 22 por ciento, pérdidas de electricidad de ocho por ciento.
Asimismo, lograr el aprovechamiento de gas natural en un 99.4 por ciento, llegar a un nivel de electrificación del país del 98.5 por ciento, tener capacidad de generación eléctrica con tecnologías limpias en un 35 por ciento y ahorro en el consumo final de energía en 280 TWh, lo que representa una disminución de un punto porcentual en la tasa de crecimiento anual.
La estrategia señala que además se fijan nueve objetivos:
Uno: restituir reservas, revertir la declinación de la producción de crudo, mantener la producción de gas natural. Dos: diversificar las fuentes de energía incrementando la participación de tecnologías limpias. Tres: incrementar los niveles de eficiencia en el consumo de energía. Cuatro: reducir el impacto ambiental del sector energético. Cinco: operar de forma eficiente, confiable y segura la infraestructura energética.
Seis: ejecutar oportunamente las inversiones necesarias en capacidad de procesamiento para reducir el costo de suministro de energéticos. Siete: fortalecer la red de transporte, almacenamiento y distribución de gas y petrolíferos. Ocho: proveer de energéticos de calidad y a precios competitivos a los centros de población marginados del país. Nueve: promover el desarrollo tecnológicos y de capital humano para el sector de energía.
El texto, emitido por la Secretaría de Energía, refiere que hay varios retos a resolver, como en materia de exploración y producción, donde es necesario revertir la declinación de la producción de crudo causada por la madurez de algunos de los yacimientos más importantes del país.
En cuanto a las reservas de hidrocarburos, gran parte de ellas se encuentra en yacimientos con mayores complejidades técnicas y de comercialización, y la participación de energías limpias en la matriz energética nacional es aún relativamente baja.
El consumo de energía en el sector transporte está creciendo aceleradamente y en Petróleos Mexicanos y la Comisión Federal de Electricidad existen brechas operativas con respecto a las mejores prácticas internacionales.