Es un hecho que las empresas telefónicas van por las Pymes, el segmento más importante de la economía. Los contratos de las grandes empresas y el gobierno federal (además de ser pocos) son otra historia que se decide en concursos en donde los usuarios no están dispuestos a perder un solo peso.
El problema con las Pymes es que la decisión entre un servicio y otro no depende de feroces licitaciones sino de la publicidad, de las promesas de un proveedor y, en menor medida, de las evidencias económicas y técnicas. Por ello, la Ley Federal del Consumidor resulta tan importante en la vigilancia de servicios de los cuales depende la operación de millones de Pymes. Los contratos de adhesión siempre resultan útiles para frenar abusos. La titular de la Profeco, Lorena Martínez, tendrá que decidir si la publicidad de Telmex en su guerra contra sus competidores no resulta engañosa y perjudicial para estos jugadores clave de la economía. Mención aparte merece la decisión tardía de Telmex de darle beneficios a sus clientes hasta que llegaron otras opciones. ¿Por qué hasta ahora? En fin, esa es otra historia y no es un tema que competa a la Profeco sino a los consumidores y a su buena memoria.
Por ejemplo, fue en noviembre pasado cuando Izzi lanzó su paquete para empresas del segmento Pyme. La reacción de Telmex fue una oferta y paquete de servicios que promete minutos ilimitados. Al parecer, según las evidencias que ya se presentan ante la Profeco, la oferta de servicios ilimitados de Telmex depende de muuuchas condiciones. ¿Le suena la frase “uso razonable”? En efecto, un criterio unilateral y bien pensado por los abogados de un proveedor de servicios telefónicos puede determinar si usted hace un uso razonable o no de sus minutos en Internet. Restricciones y cobros adicionales que llevarían el costo por minuto a 1.77 pesos envuelven al paquete de servicios ilimitados para Pymes. Aún más ni siquiera los paquetes más caros de la telefónica incluyen llamadas ilimitadas sino que se circunscriben a 1,000 minutos. ¿Se acuerda usted de la guerra de las colas? ¿Del caso del alimento para gatos? Pues estamos frente a una situación similar que la Profeco tendrá que definir en el marco de las regulaciones para evitar la publicidad engañosa. Mientras tanto, los competidores de Telmex como Izzi tienen el gran reto de demostrar a sus clientes que no sólo pueden dar más minutos sino que cuentan con servicios confiables y sin interrupciones. Su presencia en el mercado demostró que las Pymes necesitan opciones pero sin publicidad engañosa. Ya les habíamos comentado que algunos usuarios que recibieron con gran expectativa los ajustes en las tarifas telefónicas ahora se quejan de la letra pequeña que sanciona y aumenta el costo en áreas como reconexión. Es el momento de la Profeco frente a las telefónicas.
Fuente: La Crónica