Rodrigo Constandse, presidente de la Asociación Mexicana de Hábitats para la Interacción y Protección de Mamíferos Marinos (Amhmar), sugirió limitar la cantidad de nados con delfines por día.
«Reconocemos que hay una tendencia internacional sobre este tipo de interacciones pues aunque no hay ningún maltrato, sí hay una percepción de maltrato», explicó.
Incluso propuso la creación de un impuesto para que los delfinarios dediquen parte de sus recursos a zonas de conservación y reinserción.
Constandse consideró que la revisión a la NOM-135-SEMARNAT-2004 también debe abrir las fronteras y permitir una mayor importación y exportación de animales.
Aseguró que cada una de esas propuestas fue impulsada ante diputados del PRI y del PVEM para evitar la reforma a la Ley General de Vida Silvestre que, aseguró, busca acabar con el negocio de los delfinarios.
Según su testimonio, inicialmente los diputados priistas que integran la Comisión de Medio Ambiente y Recursos Naturales se aliaron con los empresarios contra de la iniciativa, al reconocer el daño económico que tendría.
Empero, el dictamen fue aprobado en comisiones por una mayoría PRI-PVEM.
«De la noche a la mañana se voltearon por una línea que marcó el CEN del PRI. Ahí te das cuenta que no está legislando en materia de medio ambiente ni de bienestar animal, sino por otros intereses», acusó.
Dijo que las seis empresas de la Amhmar emplean a 15 mil trabajadores en 26 hábitats de 6 estados donde manejan a 300 mamíferos marinos.
Constandse dijo que para la Amhmar, la prohibición sólo busca reposicionar políticamente a Jorge Emilio González «El Niño Verde».
Fuente: Reforma
