Por: Emilio Guerra Díaz
Hace apenas unos días, la diputada local Daesy Alvorada Hinojosa Rosas, del Partido Acción Nacional, presidenta de la Comisión de Participación Ciudadana de la LVIII Legislatura local, entregó a la Oficialía de Partes del Congreso de Querétaro una iniciativa de Ley del Voluntariado. El texto de la iniciativa de ley aún no se ha subido al portal del Congreso, razón por la que no le hemos podido consultar a profundidad.
De acuerdo con portal Reqronexión y los periódicos El Universal Querétaro y AM (versiones electrónicas), la legisladora señaló que el “objetivo de la Ley del Voluntariado es reconocer, fomentar, promover y facilitar la participación solidaria de los ciudadanos en actuaciones de voluntariado en el seno de organizaciones, públicas o privadas, sin ánimo de lucro; así como de fijar los requisitos que deben reunir los voluntarios y regular su relación con las organizaciones donde desarrollan sus actividades y con los destinatarios de las actuaciones de voluntariado”.
La diputada local Hinojosa Rosas señaló que el proyecto de ley considera iniciar con la creación de un padrón de organizaciones que se dedican al voluntariado que estaría a cargo de la Secretaría de Gobierno: “y tendrá el propósito de empezar a generar y procesar información accesible, confiable y actualizada acerca de la labor voluntaria en Querétaro”.
La propuesta también considera regular la participación de jóvenes menores de edad. Asimismo, se buscaría que las condiciones en las que las personas presenten servicio voluntario sean adecuadas y establecería requisitos para poder participar como voluntario(a) a favor de la “beneficencia pública”.
De acuerdo a las fuentes consultadas, la iniciativa de la ‘Ley Hinojosa’ tendría “un beneficio potencial calculable en términos del número de organizaciones civiles oficialmente registradas en Querétaro, cuyo número total es de 321 organizaciones de la sociedad civil (OSC), siendo 249 asociaciones civiles, 63 instituciones de asistencia privada, una como sociedad civil y siete bajo otra figura jurídica” (AM Querétaro y Congreso local).
Hasta ahora, en ningún estado de la República se cuenta con una ley similar. Es natural estimar que la ley como instrumento jurídico fortalece la participación ciudadana, en este caso a través del voluntariado y por lo tanto una ley de esa naturaleza debiese proteger a la persona voluntaria. Pero, ¿será que una ley incremente el tema del voluntariado en la población y más personas se animen a prestar este tipo de servicio?
La Alianza Mexicana de Voluntariado siempre ha expresado que ser voluntario conduce a las personas a estimarse como ciudadanos y que el ser ciudadano implicaría también dentro del amplio abanico de responsabilidades, participar ofreciendo servicio voluntario también. Es sin duda un círculo virtuoso. Pero también se puede dar paso al escepticismo fundamentado en las siguientes preguntas:
1. Sobre el padrón: ¿qué tipo de organizaciones consideraría?
2. ¿Qué pasaría con los voluntariados corporativos, universitarios, juveniles, vecinales, de fe religiosa, etc. que no tienen una figura legal porque están subordinados a una organización o porque no desean ser una asociación civil formal o una institución de Asistencia Privada?
3. Sobre gestión de los voluntariados: ¿puede una ley incentivar la participación ciudadana en voluntariado? ¿Dependen de ella?
4. ¿Qué obligaciones tendría, en este caso el gobierno de Querétaro, para fomentar el voluntariado?, es decir, ¿destinaría recursos económicos para fortalecer a las organizaciones que manejan voluntarios?, ¿dotaría recursos para una plataforma estatal de voluntariado?, ¿abriría y gestionaría Centros regionales de voluntariado?
Por otra parte, una ley de voluntariado podría considerar una visión integral respecto a los vínculos del voluntariado respecto a: la protección de las personas voluntarias, la facultad de ejercer un servicio que es voluntario (razón por la cual a nadie se obliga), quiénes son los beneficiarios del servicio voluntario, cuáles son las limitaciones al voluntariado infantil y juvenil (menores de edad) o bien cómo se podría facilitar su participación (para fines pedagógicos, como lo ha venido señalando la Alianza Mexicana de Voluntariado).
La Alianza Mexicana de Voluntariado estará dando seguimiento puntual a los avances de esta iniciativa por ser de gran relevancia para el voluntariado en México, más cuando nuestro país será la sede de la 24ª Conferencia Mundial de la International Association for Volunteer Efforts (IAVE por sus siglas en inglés).
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<span style=»color: #999999;»><strong><span style=»font-size: small;»>Emilio Guerra Díaz</span></strong></span>
<span style=»color: #999999;»>Emilio Guerra cuenta con amplia experiencia en la Gestión de la RSC, destacando su trabajo en el área de vinculación con la comunidad que potenciar la inversión social empresarial. Ha gerenciado fundaciones empresariales.</span>
