A medida que la responsabilidad social pasa de ser un tema únicamente de reputación corporativa y se convierte en parte integral de la estrategia de negocios de las empresas, el compromiso ambiental y social deja de ser un tema de relevancia exclusivamente para los consumidores y se transforma en un rasgo que puede agregar o restar puntos a una organización al momento de contratar y retener a los mejores talentos, principalmente cuando se trata de la tan comentada generación del milenio.
Esta es una generación de profesionales comprometidos que buscan desarrollarse en empresas que impulsen su desarrollo personal y profesional al tiempo que les ofrecen la posibilidad de generar un impacto positivo en sus comunidades y para el medio ambiente, por lo que altas retribuciones económicas casi siempre resultan insuficientes al momento de capturar su interés en un puesto determinado.
De acuerdo con un estudio publicado recientemente por Nielsen el 70% de los profesionistas de la generación del milenio asegura que el compromiso de una empresa con su comunidad puede influir positivamente en su decisión de trabajar ahí.
Esta generación a menudo puede aceptar, rechazar e incluso abandonar un trabajo con base en el impacto que esta tiene sobre su comunidad, el apoyo que ofrece a causas benéficas y el trato que dan a sus colaboradores. Pero, ¿cómo atraer a este comprometido talento?
1. Crea una cultura de la responsabilidad
Integrar el compromiso social como una de las cualidades deseables en las descripciones de las ofertas laborales en lugar de centrarse únicamente en los aspectos prácticos de las exigencias de un puesto determinado puede ser una gran forma de comenzar a atraer talento mucho más comprometido y al mismo tiempo identificar a una compañía como socialmente responsable.
2. Construye un programa de RSE significativo
Para lograrlo es fundamental involucrar a profundidad a cada uno de los colaboradores en las acciones de responsabilidad social de la compañía, a través de actividades de voluntariado o alternativas que les permitan vivir a diario el compromiso del que forman parte y recordar que su trabajo diario contribuye a generar un mundo mejor para las generaciones actuales y futuras.
3. Piensa más allá
Cuando los candidatos vienen a una entrevista deben sentirse bienvenidos y cómodos. No los hagas esperar. Saluda a los candidatos cuando entren por la puerta. Sonríe. Ofrece café o agua. Acomídete a colgar su abrigo o saco. Preséntale a otros empleados con los que te cruces por los pasillos. Dales un tour por la oficina para que se hagan expectativas, pregúntales si llegaron fácilmente a la empresa, y realmente escucha genuina y atentamente sus respuestas. Los candidatos están allí para una entrevista, pero aun así deben sentirse relajados. Ellos deben sentir la cultura empresarial de inmediato.
Piensa en cómo te tratan en una tienda de Apple: los empleados te saludan, preguntan cómo pueden ayudar y trabajan contigo uno a uno para ofrecerte un servicio personalizado. Ése es el enfoque que debes tener con los candidatos.