Por Emilio Guerra Díaz
Al igual que determinar cuáles serán los objetivos que persigan una nueva fundación o una organización operativa, crear un nuevo grupo voluntario se convierte en una labor muy interesante y se tiene que recurrir a crear un “traje a la medida”, lo mismo sucede si será un voluntariado de una organización de la sociedad civil, de iglesia, de universidad o juvenil. Sin embargo existen algunos lineamientos básicos que permitirán constituirlo de manera efectiva.
A menudo la creación de un Programa de Voluntariado Corporativo nace por diversos estímulos. Entre los más frecuentes se encuentran por citar algunos:
1. Responder a los parámetros de la responsabilidad social corporativa que persuade a contar con un grupo voluntario
2. Liderazgo de un directivo o ejecutivo de la empresa
3. Por la propia experiencia de un directivo ha prestado servicio voluntario en una asociación como Club Rotario, Leones, etc.
4. Se tiene deseos de resolver una problemática social que está presente en la comunidad
5. Se desea colaborar con el bienestar de la comunidad cercana a la empresa
6. Por inspiración religiosa
7. Identificación de valores con prácticas solidarias
8. Porque el competidor está realizando una acción voluntario que le agrega valor a su reputación corporativa
Sea cual fuese la razón, entre las recomendaciones que dan los expertos en creación de voluntariados corporativos se tiene que es fundamental distinguir las actividades que se pueden emprender y que pueden ser clasificadas según quien escribe, en tres grandes campos de acción. Por un lado las que 1) El Voluntariado Corporativo puede realizar de manera autónoma sin recurrir al apoyo de ninguna otra organización; 2) Las actividades asociadas a una organización o que responden a la lógica del negocio y 3) las que agregan valor a los socios desde la empresa.
De tal manera se tiene:
a) Actividades autónomas o independientes
• Jornadas de alto impacto como recuperación de escuelas o espacios públicos
• Jornadas de reforestación
• Colectas de dinero para organizaciones
• Colectas en especie (alimentos, ropa, juguetes, medicinas, etc.)
• Visitas a orfanatorios, escuelas, asilos, etc.
• Torneos deportivos
• Brigadas de salud o de alfabetización
Actividades alineadas al core business de la empresa
• Participación en actividades organizadas por organizaciones de la sociedad civil u otras instituciones sociales y que son socios del programa
• Aquellas que responden a los intereses de los programas de la empresa, su programa de inversión en la comunidad o fundación
• Jornadas de protección civil (prevención y atención de desastres)
Otras actividades que agregan valor
• Mentorazgo, es decir ofrecer los conocimientos de la empresa para fortalecer a organizaciones de la sociedad civil
• Transferencia de capacidades, compartir lo que hace la empresa para su eficiencia y eficacia, gerenciamiento y visibilidad con las organizaciones filantrópicas
Me preguntan cuál debe ser la mejor opción. Aún cuando cada caso empresarial es distinto, podemos recomendar estos principios:
• Que exista un propósito claro de la acción voluntaria, las ocurrencias son malas sugerencias…
• Que cuente con una estrategia principal y una secundaria. La primera se refiere a las actividades alineadas a los objetivos de la empresa, la fundación empresarial o el programa de inversión social; la otra se refiere a dar cabida a las iniciativas de los empleados con lo que se logra un sentido de pertenencia. Uno queda sorprendido cuando analiza la vida de los colaboradores, se dará cuenta de que muchos de sus colaboradores ya ayudan en alguna organización
• Destine un presupuesto para el programa
• Que acompañe y controle cada actividad emprendida, no se confíe y cuide todos los detalles
• Si hace colectas, sea proactivo en informar sobre la utilización de los recursos y vincule a los beneficiarios con los donantes
• Reúna testimonios fotográficos y videográficos para mostrar el “antes y el después”
• Contabilice las horas aportadas por los voluntarios
• Comunique a sus audiencias la acción social voluntaria
No olvide que si su programa de voluntariado corporativo solo atiende a sus colaboradores, entonces es voluntarismo y que toda acción de esta naturaleza debe atender las necesidades de un tercero, es decir, de la comunidad fuera de la empresa.
¿Tiene dudas?, ¿Desea crear su programa de voluntariado corporativo?, ¿Necesita ideas? Contacte a los especialistas de la Alianza Mexicana de Voluntariado quienes le ayudarán en este propósito. Escriba a: [email protected] o llame al teléfono 5514 3038.
Emilio Guerra Díaz
Emilio Guerra cuenta con amplia experiencia en la Gestión de la RSC, destacando su trabajo en el área de vinculación con la comunidad que potenciar la inversión social empresarial. Ha gerenciado fundaciones empresariales.
Puede ser al correo que mencionas o a [email protected]
[…] Fuente: Emilio Guerra Díaz (ExpokNews) […]