En 2011, la ONU publicó su Guía de Principios Rectores para las Empresas y los Derechos Humanos con el objetivo de prevenir y abordar los impactos adversos de los negocios en los derechos humanos. Cuatro años más tarde, yendo más allá en su presión para que las empresas consideren a los DD.HH., presentó el Guiding Principles Reporting Framework.
Este último es un documento que consiste de preguntas concretas que todas las empresas deberían responder al comunicar sobre su desempeño en este tema, convirtiéndose en una guía clara para reportar sus políticas, procesos y desempeños
Tan solo un puñado de empresas ha utilizado este marco para sus reportes públicos, siendo Unilever la primera de ellas en junio de 2015. Sus otros early adopters son Nestlé (en su reporte publicado en 2016), H&M, Newmond, ABN AMRO y Ericsson. Otras compañías han utilizado la guía para sus procesos internos.
El marco se divide en tres grandes temas: gobernanza del respeto por los derechos humanos, definición del enfoque del reporte y administración de temas de derechos humanos cada uno. Todos ellos contienen subtemas y preguntas específicas a responder dentro de cada uno.
A continuación presentamos los siete principios con los que abre el documento, y que las empresas deben tener en cuenta al reportar.
Poner a los DD.HH. en el contexto de los negocios:
Los lectores de un reporte corporativo sobre derechos humanos deben ser capaces de comprender el contexto más amplio sobre lo que las compañías hacen. Es por eso que se deben incluir datos como la estructura organizacional, el gobierno corporativo, la estrategia y las operaciones. Esto a menos de que la información sobre DD.HH. se presente dentro de un reporte GRI, en el que ya se estarían incluyendo estos requisitos.
Ofrecer un mínimo de información:
Se presenta lo mínimo que debe reportar una empresa que usa el Framework (responder las dos grandes preguntas de la parte A, los cuatro requetimientos informativos de la parte B y contestar al menos seis preguntas de la parte C.)
Lograrlo debe ser posible para cualquier empresa que se haya comprometido con los derechos humanos. La meta es que con el tiempo se mejore la respuesta a las preguntas de apoyo, así como la calidad de su contenido.
Demostrar avance continuo
La ONU comprende que implementar políticas y procesos toma tiempo, y que además tienen que evolucionar junto con el negocio. Por lo tanto, se espera que poner estos principios en marcha sea un proceso continuo y que en cada reporte se haga evidente el avance.
Enfocarse en el respeto a los DD.HH.
Lo que se busca es que todas las empresas, conforme al Principio 11, eviten infringir los derechos humanos de otros y que se responsabilicen por los impactos en los que se ven involucradas. Es por eso que este marco no contempla actividades que apoyan o promuevan los derechos humanos si no están relacionadas directamente con la operación de la compañía.
Abordar los impactos más severos
Las empresas deben enfocarse en los impactos más severos, tanto actuales como potenciales, que se asocian con sus actividades.
Proveer ejemplos relevantes
Las respuestas deben estar basadas en información específica, lo cual incluye ejemplos de cómo han ocurrido los impactos, así como la forma en la que se han prevenido, mitigado o remediado. Estos ejemplos deben ser balanceados y representar en forma general el desempeño del negocio.
Explicar cualquier omisión
Existen circunstancias en las que una empresa no podrá revelar cierta información y por lo tanto alguna respuesta puede quedar incompleta. En estos casos, se debe indicar la razón específica (prohibición legal, confidencialidad, riesgos para los grupos de interés, etc).
Por ahora el documento solo se encuentra en inglés, y lo puedes descargar aquí.