Los avances modernos en tecnología hacen posible el empleo de personas con discapacidades más allá de los límites. ¿De qué se trata la inclusión 4.0?
La historia de Xia Boyu
Xia Boyu, un ciudadano chino de sesenta y nueve años que alcanzó con éxito el pico en mayo de 2018, esto fue solo una parte de la respuesta. Lo que hace diferente la historia de Xia es que no tiene piernas.
Hizo una caminata por el monte Everest con prótesis, en un claro ejemplo de cómo la tecnología puede complementar soluciones donde la buena voluntad y el buen corazón no son suficientes.
Inclusión 4.0 – no hay imposibles
Lo que se consideraba imposible para una persona con capacidades físicas o intelectuales restringidas hace una década es ahora una idea de último momento en muchos lugares de trabajo que contratan a personas con discapacidades.
Con máquinas o herramientas semiautomatizadas hechas a medida, las personas con autismo, síndrome Down, extremidades cortadas o discapacidades de la vista pueden producir resultados de alta calidad a un precio razonable, de buena calidad y a salvo de cualquier daño.
Inclusion Factory = inclusión 4.0
Establecida en 2014, Inclusion Factory en Taicang, China, surgió cuando varias compañías alemanas de varias industrias crearon lo que entonces se podría decir que fue el taller pionero en China para contratar solo personas con discapacidades intelectuales para fines de fabricación industrial.
Cinco años después, lo que antes parecía un piloto y una idea valiente es un negocio bien establecido, que produce componentes complejos y soluciones técnicas y actúa como un proveedor confiable incluso para las compañías de ingeniería de primer nivel con una larga historia corporativa.
Algunos lo llaman cadena de suministro responsable, pero para muchas de las personas involucradas en Inclusion Factory, es la historia de la evolución de un negocio ordinario con tecnología.
Lo que hace posible la inclusión 4.0 y esfuerzos similares en todo el mundo es el fuerte compromiso de los expertos sociales, por un lado, y los esfuerzos de ingeniería ejemplares, por el otro.
Las soluciones de maquinaria eléctrica o neumática de Poka Yoke permiten a las personas con discapacidades físicas o intelectuales realizar tareas de forma independiente y eficiente que de otro modo serían muy difíciles o incluso imposibles sin el uso de tecnología personalizada.
Inclusión 4.0 en SAP
Las recientes mejoras en las tecnologías inteligentes, incluidos los guantes inteligentes, las estaciones de trabajo inteligente, los pisos de producción inteligentes, la realidad aumentada para la fabricación, entre otros, llevan la tendencia un paso más allá, permitiendo la realización de tareas cada vez más complejas con una mayor independencia operativa de los trabajadores que de otra manera tendrían problemas.
El equipo de Social Sabbatical de SAP en Shanghái dio un impulso especial a los esfuerzos de Inclusion Factory.
La iniciativa Social Sabbatical de SAP es una cartera de programas de voluntariado pro bono en los que equipos muy diversos de empleados de SAP ayudan a resolver los desafíos estratégicos de las organizaciones sin fines de lucro y empresas sociales que se centran en salvar la brecha digital.
En el caso de Inclusion Factory, este era exactamente el tipo de ayuda que se necesitaba. La misión principal del proyecto es contratar y trabajar con personas con discapacidad intelectual. Esto viene una gran cantidad de desafíos técnicos.
Los procesos de ingeniería completados por personas con discapacidad intelectual requieren soluciones únicas. Fue en este caso que SAP Shanghai implementó un equipo de apoyo, lo que permitió comprender muy bien que sus capacidades de ingeniería afectarían un cambio social positivo.
Leilei Zhou, un ingeniero de software de SAP Shanghai y miembro del equipo de consultoría pro bono, dijo:
“La experiencia de los voluntarios fue una oportunidad maravillosa para comprender los puntos débiles de Inclusion Factory y aplicar nuestras habilidades de TI para resolverlos. Nuestra contribución fue significativa porque Inclusion Factory no solo proporciona un trabajo al trabajador, sino que también continúa desarrollando a cada individuo y ayudándoles a vivir de forma independiente. Hemos estado bastante inspirados por el respeto de la dignidad y la individualidad de la fábrica.”
A partir de agosto de 2018, se llevaron a cabo una serie de reuniones informales entre expertos de SAP y los gerentes de proyectos de Inclusion Factory para analizar una asociación.
Cuando se definió un alcance de trabajo adecuado en función de los conjuntos de habilidades de los consultores y las prioridades de la organización, SAP envió un equipo dedicado de tres expertos comerciales a Inclusion Factory durante dos semanas para analizar las necesidades del proyecto y diseñar soluciones personalizadas.
Como resultado, una herramienta de producto mínimo viable (MVP) para rastrear la velocidad y productividad de los trabajadores se lanzó en la fase de prueba en noviembre.
Si bien el compromiso de dos semanas ha pasado, se han celebrado numerosas reuniones con SAP desde entonces y desde principios de 2019, la colaboración continúa dando sus frutos con SAP Shanghai entregando un flujo de soluciones para apoyar la misión de la organización.
Los programas sociales innovadores que fomentan la confianza en sí mismos y, en consecuencia, la inclusión 4.0 real de los empleados discapacitados ahora complementan las herramientas técnicas y las ayudas a los trabajadores.
En un entorno empresarial donde la eficiencia y las ganancias son factores dominantes, el empleo de los trabajadores con discapacidades seguramente se vuelve atractivo para las organizaciones tan pronto como se convierte en un contribuyente positivo a los resultados finales.
Inclusion Factory está demostrando exactamente esto a través de su prueba de concepto multiplicable que rompe las barreras que retienen a millones de personas en China y más allá del trabajo significativo y un camino para convertirse en miembros de la sociedad respetados.
El impacto va mucho más allá de Taicang o Shanghai. Inclusion Factory, como proyecto piloto para el empleo inclusivo, establece tendencias y ofrece las mejores prácticas en una escala geográfica mucho más amplia, con su primer proyecto doble ya en ejecución en la ciudad de Zhuhai.
El espectro de discapacidades es amplio, pero equipado con la mentalidad correcta y las soluciones de ingeniería adecuadas, el «dis» en «discapacidades» se convierte en nada más que un prefijo redundante en una palabra obsoleta.
La tecnología del futuro ya está aquí. Solo hay que entenderlo, aceptarlo y ponerlo en las manos correctas por el bien de un mañana mejor y más inclusivo.
