A medida que nos acercamos al final del año, dos importantes cumbres de la ONU, la COP15 y la COP27, resultan más relevantes que nunca para abordar los apremiantes desafíos ambientales que enfrenta nuestro planeta. Aunque sus nombres son similares, cada una tiene su particularidad y relevancia.
La importancia de estos encuentros internacionales para la agenda climática radica en el potencial que tienen para establecer negociaciones que definan medidas que contengan la crisis climática a escala global. Pero ¿qué es la COP15, qué podemos esperar de ella y en qué se diferencia de la pasada COP27?
¿Qué es la COP15?
Comencemos por señalar que el acrónimo COP significa Conferencia de las Partes, estas son conferencias organizadas por las Naciones Unidas y a las que asisten Estados, organizaciones regionales y organizaciones no gubernamentales.
La COP más conocida se lleva a cabo anualmente en diferentes países, y los delegados se reúnen para coordinar acciones y objetivos globales para abordar el cambio climático. Este 2022, la COP27 se realizó en Sharm El-Sheikh, Egipto.
En cambio, la otra COP se centra en la biodiversidad. Esta conferencia se organiza cada dos años y tiene como objetivo abordar la disminución sin precedentes de la biodiversidad de nuestro planeta, al tiempo que ayuda a elevar la protección de la biodiversidad al mismo nivel que el clima. Este año, la COP15 se realiza de manera presencial en Montreal, Canadá.
Los números de cada COP simplemente indican cuántas veces se han reunido las partes. Si bien ambas conferencias se han celebrado históricamente por separado, sus enfoques están intrínsecamente vinculados. Para tener una mayor comprensión de qué es la COP15 y en qué se diferencia de la COP27, exploremos algunos temas que están en el centro de atención de cada cumbre.
Esto define a la COP15…
1. La COP15 tiene que ver con la biodiversidad
COP15 es la abreviatura de la 15ª reunión de la Conferencia de las Partes del Convenio de las Naciones Unidas sobre la Diversidad Biológica (CDB). Se trata de una cumbre de dos semanas que tiene lugar del 7 al 19 de diciembre de 2022. Será la mayor conferencia sobre biodiversidad en la década con países que esperan llegar a un acuerdo sobre la protección y la restauración de la naturaleza.
Cabe mencionar que el CDB es un acuerdo internacional histórico que establece cómo salvaguardar las especies de plantas y animales y garantizar que los recursos naturales se utilicen de manera sostenible. Fue acordado por primera vez en la Cumbre de la Tierra en Brasil en 1992 y ha sido ratificado por 196 naciones.
Por lo que es probable que los ministros de medio ambiente asistan al segmento de «alto nivel» en la COP15 del 15 al 17 de diciembre. Asimismo, grupos de la sociedad civil, pueblos indígenas, científicos, líderes empresariales y otros participarán como observadores y a través de eventos paralelos. Además, cientos de periodistas cubrirán las negociaciones.
2. El planeta sería inhabitable sin la biodiversidad
La biodiversidad es vital para la vida en nuestro planeta. Desde nuestros océanos hasta nuestros bosques, la naturaleza sustenta el sistema alimentario mundial; proporciona agua dulce; mantiene la calidad del aire y los suelos; regula el clima; proporciona polinización y control de plagas; absorbe las emisiones de carbono; y reduce el impacto de los peligros naturales.
No obstante, si dañamos demasiado estos ecosistemas, corremos el riesgo de poner en peligro su capacidad para proporcionar servicios básicos de soporte vital. Y, ese es el problema, estamos dañando la naturaleza a un ritmo sin precedentes.
De hecho, la biodiversidad está disminuyendo más rápido que en cualquier otro momento de la historia humana. Como afirma el Panel Intergubernamental de Ciencia y Política sobre Biodiversidad y Servicios de los Ecosistemas, hay un millón de especies en peligro de extinción.
3. China es el presidente de la COP15, pero se llevará a cabo en… Canadá
La COP15 debía realizarse en la ciudad china de Kunming en octubre de 2020, pero se retrasó cuatro veces debido a la COVID-19. Por lo que, para mantener el impulso, China inauguró oficialmente la COP15 en Kunming en octubre de 2021, un evento mayormente en línea.
Frente a las restricciones de la pandemia en curso en China, la Secretaría del CDB anunció en junio que la parte principal de la reunión se llevaría a cabo en Montreal, Canadá. Sin embargo, China seguirá siendo el presidente oficial de la reunión con Huang Runqiu, ministro de Ecología y Medio Ambiente, liderando las conversaciones.
4. La COP15 es diferente a la COP27, pero hay similitudes
Como hemos dicho, las COP de biodiversidad son independientes de las COP climáticas. Es decir, la COP15 se ocupa de la biodiversidad, mientras que la COP27, abreviatura de la 27ª Conferencia de las Partes de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, se centró en resolver el problema del cambio climático.
La COP27 se llevó a cabo en noviembre en el centro turístico egipcio de Sharm el-Sheikh y produjo un conjunto mixto de resultados. Esto incluyó un acuerdo histórico para proporcionar financiamiento de «pérdidas y daños» que hará que las naciones ricas paguen a los países más pobres por los daños y las pérdidas económicas causadas por el cambio climático.
Sin embargo, los críticos han señalado que la COP27 no fue lo suficientemente lejos ni lo suficientemente rápido para reducir las emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI) causantes del calentamiento climático.
El acuerdo final de la COP27 incluyó una decisión de portada, conocida como el Plan de Implementación de Sharm el-Sheikh, que incluía, por primera vez, secciones dedicadas a los océanos, los bosques y la agricultura. Lo cual muestra un reconocimiento del vínculo entre la protección de la naturaleza y el cambio climático.
5. La COP15 tiene grandes ambiciones, pero un historial pobre
El objetivo de la COP15 es adoptar un marco acordado a nivel mundial, denominado Marco Global de Biodiversidad Post-2020, para «vivir en armonía con la naturaleza». La visión es que para 2050 «la biodiversidad sea valorada, conservada, restaurada y utilizada de manera inteligente, manteniendo los servicios de los ecosistemas, sosteniendo un planeta saludable y brindando beneficios esenciales para todas las personas».
El marco describe lo que los países deben hacer, individual y colectivamente, para detener y revertir el daño a las plantas, los animales y los ecosistemas. Por ejemplo, el borrador del texto incluye 21 objetivos orientados a la acción que deben alcanzarse para 2030. Los cuales cubren una amplia gama de temas, desde la expansión de áreas protegidas y la reducción de la contaminación, hasta garantizar que la producción de alimentos sea sostenible.
Los objetivos a largo plazo para 2050 se centran en la conservación, el uso sostenible de la biodiversidad y la distribución justa de beneficios. Así como garantizar que existan los recursos financieros y técnicos necesarios para lograr la visión.
Si bien las esperanzas son altas, los participantes también son conscientes de que los esfuerzos globales anteriores para abordar la pérdida de biodiversidad prometieron demasiado y no cumplieron.
En 2002, las Partes del Convenio se comprometieron a «lograr para 2010 una reducción significativa de la tasa actual de pérdida de biodiversidad». Esto no se materializó. En la COP10 en Nagoya, Japón, en 2010, los gobiernos acordaron ambiciosos objetivos globales llamados 20 Objetivos de Biodiversidad de Aichi. Ninguno de estos objetivos se cumplió por completo antes de la fecha límite de 2020 y la biodiversidad ha disminuido aún más durante la última década.
6. La COP15 deberá superar grandes desafíos
Es probable que haya divisiones significativas entre el «norte global» y el «sur global». Muchos países en desarrollo pertenecientes al sur global necesitarán más dinero si quieren expandir las áreas protegidas y hacer crecer sus economías de una manera menos destructiva que sus contrapartes más ricas del norte.
Por lo tanto, acordar cómo los países movilizan fondos para implementar el nuevo marco y, específicamente, cuánto proporcionarán los países más ricos para ayudar a los más pobres a preservar su biodiversidad serán discusiones clave.
De esta manera, establecer y reportar objetivos nacionales también será un desafío. Más aún el monitoreo robusto requerido para comparar y rastrear los esfuerzos de diferentes países. Por lo que en todo esto será vital que los pueblos indígenas y las comunidades locales tengan suficiente voz en las discusiones sobre el intercambio de conocimientos y el beneficio de la biodiversidad.
Dicho esto, lo que está en juego es importante, se trata de lograr acuerdos universales y vinculantes a nivel global, que permitan luchar eficazmente contra el cambio climático, y proteger y restaurar la biodiversidad mientras se avanza en la transición hacia sociedades y economías resilientes y bajas emisiones de GEI.
