La nueva definición de pobreza anteriormente estaba relacionada con las personas que no tenían empleo y que se encontraban inactivas. Sin embargo, ya es diferente. Ahora, también se le llama pobreza a la situación en la que a pesar de disponer de un empleo o de alguna prestación no se tienen recursos suficientes para cubrir sus necesidades principales.
Dentro de esta nueva definición, los nuevos pobres ahora son las mujeres a la que se está llamando feminización del empoderamiento. Al principio, este concepto era característico de los hogares monomarentales, cuya presencia social vivía un fuerte aumento.
La población que está en situación de pobreza será aquella cuyos ingresos sean insuficientes para adquirir los bienes y servicios que requiere para satisfacer sus necesidades. De acuerdo con la publicación llamada la Feminización de la Pobreza en México, más de mil millones de personas en todo el mundo, viven actualmente en situaciones inaceptables de pobreza, principalmente en aquellos países que están en desarrollo.
Más de mil millones de personas en todo el mundo, viven actualmente en situaciones inaceptables de pobreza, principalmente en aquellos países que están en desarrollo.
De acuerdo con Iñaki García, responsable de Farmamundi en Aragón, España en entrevista para El Diario, es, las diferencias que hay en cómo se atiende a hombres y a mujeres en países menos desarrollados, existe prevalencia de patrones patriarcales.
Por ejemplo, «estamos viendo que algunos problemas que aparecen en sociedades culturalmente cercanas a la nuestra, como la violencia o las diferencias salariales, están aún más acentuados en países en vías de desarrollo. La invisibilidad de la enfermedad de la mujer está muy acentuada, en el sentido de que, a la hora de repartir los recursos disponibles para la salud, hay un privilegio en detrimento del sexo femenino.
Esto, también se puede entender si pensamos en la feminización de la pobreza. El 70 % de la población que vive con menos de un dólar al día, según Naciones Unidas, son mujeres o niños. Esa pobreza incorpora una barrera para el acceso a la salud. Al fin y al cabo, la salud tiene que ver bastante con los ingresos».
Según el documento, feminización de la pobreza el 24% de los hogares en condiciones de pobreza alimentaria son dirigidos por una mujer.
Cuando se registra disminución de la pobreza se ha observado que, en los hogares con jefatura femenina, el ritmo de reducción es más lento, especialmente en zonas urbanas, con un descenso de un punto porcentual desde el 200, en comparación con casi cinco puntos porcentuales para los hogares que son dirigidos por hombres.
Para poder eliminar la pobreza y lograr el desarrollo sostenible, las mujeres y los hombres deben participar plenamente y por igual en la formulación de las políticas y estrategias macroeconómicas y sociales.
La brecha entre la existencia de derechos y la posibilidad de disfrutarlos efectivamente, se deriva del hecho de que los gobiernos no están verdaderamente empeñados en promover y proteger sos derechos y no informan por igual a las mujeres y a los hombres acerca de ellos.
En España, actualmente hay ocho millones de pobres, de los cuales la mayoría son mujeres, sin embargo la tendencia la feminización de la pobreza es contrastable, según El País, en los países del norte y en los del sur.
