En diciembre de 2018, Moody’s advirtió que, de todas las ciudades europeas, Atenas tenía el mayor riesgo de que su calor extremo representara una amenaza para su calificación crediticia.
Tiene sentido, entonces, que la capital griega se convierta en la primera de Europa en nombrar un director de calor, después de Miami, que anunció a la primera persona en ocupar el cargo en el mundo en mayo.
La solidez crediticia de Atenas será sensible al cambio climático … particularmente si las olas de calor deprimieran la actividad turística e impactaran negativamente la fortaleza económica general de la ciudad.
Moody´s.
De acuerdo con Fast Company, en un anuncio el alcalde Kostas Bakoyannis designará a la ex teniente de alcalde Eleni Myrivili para ocupar el nuevo puesto. Ella asumirá un papel de liderazgo en Europa en la batalla contra el calor, un «asesino silencioso» que supuestamente provocó la muerte de 104.000 ancianos en toda la UE. en 2018.
¿Por qué se requiere un director de calor en Atenas?
Entre otras razones, se eligió Atenas simplemente porque es la ciudad más calurosa de la Europa continental, «con el peor pronóstico», dice Myrivili. Un estudio de 2018 informó que Atenas experimentaría los mayores aumentos de olas de calor en toda Europa para 2050.
Los días de olas de calor, clasificados como aquellos por encima de los 35 grados C, aumentarán de 15 a 20 grados para 2050, y las lluvias son se espera que disminuyan. Atenas sufre alrededor de 200 muertes al año por el calor, y por cada grado que sube la temperatura, la tasa de mortalidad por calor entre las personas de 65 años o más aumenta en un 18%.
Pero, para una ciudad muy dependiente del turismo, fue la precaución de Moody’s y el riesgo económico lo que supuso «una gran llamada de atención», dice Kathy Baughman McLeod, vicepresidenta senior y directora del Centro de Resiliencia de la Fundación Adrienne Arsht-Rockefeller.
La Extreme Heat Resilience Alliance (EHRA) de la fundación está lanzando esta edición europea del puesto de director de calor ahora, mientras el continente alcanza su época más calurosa del año.
Myrivili, que ya era miembro principal de la fundación y copresidente del grupo de trabajo sobre políticas de la EHRA, encajaba naturalmente.
Kathy Baughman McLeod, vicepresidenta senior y directora del Centro de Resiliencia de la Fundación Adrienne Arsht-Rockefeller.
Como teniente de alcalde, Myrivili se centró en la adaptación al cambio climático, y su último papel ha sido como directora de resiliencia de la ciudad, en la que encabezó la creación de los objetivos de acción climática de Atenas para 2030.
Aún así, ese fue un papel climático más amplio, cuando Atenas necesitaba enfocarse con láser en el calor. “Esto me dará un mandato que me permitirá ser más práctico”, dice Myrivili. Al igual que en Miami, el funcionario buscará e implementará soluciones para el calor extremo y reunirá a todas las partes interesadas necesarias, desde los líderes municipales y regionales hasta el sector privado.
También espera tener que crear conciencia, porque muchas personas no se dan cuenta de que están en riesgo, incluso cuando el calor se ha vuelto más insoportable. «Es casi como si no existiera», dice. «La gente está sufriendo y piensa, ‘Oh, no es gran cosa'».
Pero Atenas es una ciudad antigua, con una infraestructura obsoleta, lo que hace que sea más difícil simplemente incorporar nuevas funciones. Como oficial de resiliencia, Myrivili dice que intentó dos veces imitar los desarrollos de pavimentos frescos que tienen lugar en Los Ángeles y Phoenix.
Pero, los pavimentos no se adhieren correctamente con el material de la calle. “El diablo está en los detalles”, dice sobre la dificultad única en Atenas. «Realmente debes tener cuidado con cómo lo haces y dónde lo haces … para asegurarte de no tener efectos adversos».
Ayuda a los más vulnerables
Como están haciendo en Miami, Myrivili se centrará en ayudar a los más vulnerables: los pobres y, en el caso de Atenas, los inmigrantes y refugiados, que viven en barrios que son islas de calor urbano extremo.
Las personas que menos hicieron para causar esto son las que más sufren.
Kathy Baughman McLeod, vicepresidenta senior y directora del Centro de Resiliencia de la Fundación Adrienne Arsht-Rockefeller.
El aire acondicionado en los hogares no es tan común como en los EE. UU., y el 20% de los atenienses tienen poca energía o no pueden hacer funcionar un enfriamiento sostenible en sus hogares.
El nuevo oficial planea cerrar esa brecha pero también mejorar los “lugares frescos” de la ciudad: edificios públicos cubiertos, como escuelas y bibliotecas, donde la gente puede ir a refrescarse.
Hay planes para aumentar los espacios verdes que ofrecen copas de árboles. Y otra prioridad, en una ciudad particularmente seca, es el agua. Las características de agua existentes, como las fuentes, «me parecen una solución de la década de 1950», dice, y en su lugar prevé instalar una serie de aspersores, similares a los que se encuentran en los parques infantiles de Nueva York.
En muchos sentidos, Atenas ya ha estado liderando el camino, habiendo trabajado durante mucho tiempo con EHRA; de hecho, en 2020, Moody’s mejoró la calificación de la ciudad, señalando que ya estaba haciendo inversiones a largo plazo para combatir el calor.
Myrivili trabajará en estrecha colaboración para compartir orientación con otros alcaldes europeos, que también buscan actualizar sus ciudades más antiguas con estrategias de adaptación al calor; con Miami; y pronto, con Freetown, Sierra Leona, la próxima ciudad en la lista en nombrar a un director de calor, lo que sucederá en noviembre, cuando comience el verano del hemisferio sur.
