En los últimos años, el concepto de finanzas ha adquirido cada día más auge, casi en cualquier lugar escuchamos esta palabra acompañada de otra: finanzas personales, finanzas corporativas, finanzas sostenibles. ¿De qué van estas últimas? A continuación te contamos qué son las finanzas sostenibles.
Para entender su significado es necesario saber que las finanzas forman parte de la economía, la cual se encarga de estudiar la obtención, gestión y optimización de los flujos de dinero, pero profundicemos mucho más en el tema.
¿Qué son las finanzas sostenibles?
Las finanzas, como se ha mencionado, se encargan de la optimización de los flujos de dinero relacionado con las inversiones, financiación y cobros. Para garantizar su correcto funcionamiento se evalúan de manera continua, tanto las mejores inversiones como la financiación más adecuada con el objetivo de:
- Maximizar el valor de la organización.
- Garantizar que se pueden atender todos los compromisos de pago.
De acuerdo con la Unión Europea:
Las finanzas sostenibles se refieren al proceso de tomar en cuenta consideraciones ambientales, sociales y de gobernanza (ESG) al tomar decisiones de inversión en el sector financiero, lo que lleva a inversiones a más largo plazo en actividades y proyectos económicos sostenibles.
Unión Europea.
Sobre esta definición resaltan varios elementos, primero, la palabra clave «sostenible», tanto con el planeta como en el tiempo.
En cuanto al planeta, las finanzas sostenibles son una estrategia en la que el cuidado ambiental resulta fundamental, pues sin un planeta donde se desarrolle la humanidad, el resto de los objetivos carecen de valor, por lo que el tiempo también es crucial.
Las finanzas sostenibles se anclan de los pilares ESG (Environmental, Social and Governance) que a su vez son base del desarrollo sostenible, elementos que sirven para lograr los objetivos establecidos en la Agenda 2030.
Cumplir la meta de una economía sostenible
Las finanzas sostenibles tienen relevancia para el planeta, en particular porque impulsan el cumplimento de los objetivos de la Agenda 2030 y colaboran a evitar el daño ambiental. Entre las acciones más importantes destacan combatir el cambio climático. Por mencionar un dato:
Los bosques y la agricultura representan más del 30% de la solución al cambio climático, pero reciben menos del 3% del financiamiento climático.
Ming Chun Tang, escritor en Landscape news.
En ese contexto existen estrategias y planes concretos, algunos ejemplo son:
- Desafío de Bonn: Su objetivo es restaurar 350 millones de hectáreas a nivel mundial para 2030.
- Década de las Naciones Unidas para la Restauración de Ecosistemas: Iniciativa que ha comenzado y está redoblando los esfuerzos para recaudar fondos para la restauración.
Para llevar a cabo estos planes y programas se necesitan recursos económicos, de acuerdo con Nature Conservancy se requerirá gastar entre 600 y 800 mil millones de dólares adicionales por año para revertir la crisis de la biodiversidad para 2030.
Esto sin contar que las economías emergentes requierirán aproximadamente 3 mil millones de dólares por año para lograr las metas de la Agenda 2030. De hecho, el Banco Mundial señala:
En general, no hay financiamiento suficiente para implementar las medidas de mitigación y adaptación necesarias. Muchos países no están listos para enfrentar el desafío del cambio climático y los avances en la reducción de las emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI) son demasiado lentos.
Banco Mundial.
Esto resalta la importancia de cerrar la brecha financiera, lo cual requerirá un esfuerzo coordinado entre los sectores público y privado, desde el nivel local hasta el global a través de la formulación de políticas financieras. Todo con la finalidad de construir una economía sostenible con:
- Bajas emisiones de carbono.
- Eficiente en el uso de los recursos.
- A la vanguardia de los esfuerzos para construir un sistema financiero que apoye el crecimiento sostenible.
Para que esta meta se cumpla, la clave se encuentra en las finanzas sostenibles que a través de distintas estrategias de organismos internacionales impulsan dicho objetivo.
¿Hay otra riqueza de las naciones?
El centro de las finanzas sostenibles se encuentra en las aproximaciones que brinda el Banco Mundial —organización multinacional especializada en finanzas y asistencia— que plantea diferentes estrategias para la sostenibilidad financiera.
Empero, es menester destacar el Programa Global de Sostenibilidad (GPS por sus siglas en inglés), el cual se ancla en la nueva riqueza de las naciones. Dentro de este planteamiento sobresalen dos elementos el capital natural y el capital humano.
Capital natural
El capital natural se refiere a las reservas de activos naturales, es decir, todo aquello que se puede capitalizar y que proviene de la naturaleza. Datos relevantes sobre este capital esencial para las finanzas sostenibles resaltan que:
- 47% de la riqueza proviene del capital natural.
- Las economías de medianos y bajos ingresos dependen más de este capital.
- La parte natural del capital disminuye gradualmente a medida que los países pasan de niveles bajos a medios y estado de ingresos altos.
La importancia de dar énfasis al capital natural radica en que tradicionalmente la productividad se media a partir de dos variables: existencias de trabajo y capital producido.
Sin embargo, con estos elementos, al tomar el capital natural también se consideran los desafíos que presentan en cuanto a:
- Recursos renovables: Si se administran de forma sostenible, pueden producir beneficios a perpetuidad. Por ejemplo, el uso productivo de las energías renovables puede incrementar los beneficios que generan y, en consecuencia, el valor de estos activos.
- El capital natural no renovable ofrece una oportunidad de financiar el desarrollo invirtiendo las rentas de los recursos en otros activos para reemplazar el capital natural agotado.
Capital humano
La nueva riqueza de las naciones presentada por el Banco Mundial destaca que tradicionalmente se interpreta que el capital humano incluye, entre otros factores, los años de escolaridad de la población, el aprendizaje real en los años escolares y después de dejar la escuela, así como inversiones en salud.
Si bien son factores importantes, la forma en la que se miden para la nueva riqueza de las naciones respecto al capital humano, radica en tomar en cuenta las ganancias esperadas de la fuerza laboral.
Esta medida no solo toma el número de años de educación completados por los trabajadores, sino también en las ganancias de ingresos asociadas con la educación en:
- Calidad del aprendizaje que tiene lugar en la escuela.
- Cuánto tiempo pueden laborar los trabajadores (que implícitamente da cuenta de las condiciones de salud a través de la esperanza de vida, entre otros).
Por mencionar unos datos, en términos per cápita, la riqueza del capital humano se situó en 108.654 dólares por persona en 2014 frente a 88.874 dólares en 1995, lo que representa aproximadamente dos tercios de riqueza global. Tal como se observa hay una disminución.
Esta disminución se observa solo en los países comparativamente más ricos. En la mayoría de los países en desarrollo, la proporción del capital humano en la riqueza total está aumentando.
En términos simples, una fuerza laboral calificada parece ser la clave para el futuro desarrollo en una economía cada vez más globalizada.
Banco Mundial.
Al considerar esta nueva riqueza de las naciones, el programa GPS se ancla en 3 pilares clave:
- Pilar 1: Mediciones globales del capital natural y los servicios de los ecosistemas que mejoran la información.
- Pilar 2: Fortalecimiento de la capacidad de los países para producir y utilizar la contabilidad del capital natural para las decisiones de política y planificación.
- Pilar 3: Incentivos. Promover la investigación sobre cómo los factores ambientales impactan el riesgo y la rentabilidad financiera en los mercados de renta fija.
Estos pilares ayudan a entender la vocación de las finanzas sostenibles, sin embargo, es necesario precisar su funcionamiento.
¿Cómo funcionan?
Hay que tener claro que los instrumentos financieros predominantes en las finanzas sostenibles son la deuda y el capital social. Empero, los instrumentos financieros tienen varias características:
- Nivel de antigüedad (capital junior frente a acciones preferentes).
- Canal a través del cual se organiza el flujo de financiamiento.
- Actores intermediarios (tipos de inversionistas y vehículos de inversión).
- Términos del convenio y origen de los fondos.
La forma en la que funcionan los instrumentos son:
Capital social
En las primeras etapas de un proyecto, el financiamiento de capital es el principal método de inversión utilizado, y los inversores reciben una participación en la propiedad (acciones o acciones) del proyecto a cambio de la cantidad de capital que invierten. Existen dos tipos de acciones: acciones ordinarias (también llamadas acciones junior ) y acciones preferentes.
En caso de liquidación, los propietarios de acciones preferentes deben pagar antes que los de las acciones ordinarias, por lo que están expuestos a un menor riesgo. Para atraer a otros posibles inversores en acciones, los fondos climáticos y los inversores de impacto invierten específicamente en acciones ordinarias para absorber parte del riesgo de otros inversores que compran acciones preferentes.
Deuda
Otro instrumento de financiamiento es la deuda, que se convierte en el método de inversión predominante. Los inversores prestan dinero a los prestatarios y este dinero se reembolsa con intereses. El financiamiento de la deuda puede tomar dos formas:
- Préstamo: Es una transferencia de dinero de un banco a una empresa o individuo.
- Bono: Es una transferencia de dinero del público o del mercado a una empresa que emite el bono. Los bonos generalmente involucran grandes sumas y pueden ser comprados por el público en general.
Financiar la preservación de los ecosistemas del mundo requerirá miles de millones de dólares de capital adicional, y el capital de inversión privado puede ser la principal fuente de dichos fondos.
El crecimiento de las finanzas sostenibles representa una oportunidad emergente tanto para la inversión del sector privado como para desarrolladores de proyectos, y sin duda es un esquema económico que cada vez se robustece y crece continuamente.