Cuando se habla de sostenibilidad y estrategias ambientales, uno de los términos más usados y relevantes es el de gases de efecto invernadero, conocidos como GEI. Estos representan uno de los grandes retos para frenar el cambio climático y mantener un planeta con condiciones de vida óptimas, por lo que saber qué son los GEI resulta clave para industrias, instituciones e individuos.
Desde hace décadas, la alerta sobre las consecuencias que tiene el incremento de la temperatura global ha desatado la preocupación de la comunidad científica y de grupos de activistas que han intentado que la otros sectores se interesen por contrarrestar su producción de gases contaminantes. Con la llegada de la Responsabilidad Social al mundo de los negocios, muchas empresas están dirigiendo acciones contra los GEI, sin embargo, aún falta mucho por hacer.
Por lo que, un primer paso es conocer a fondo qué son los GEI, cómo se producen, sus afectaciones y la forma en la que se pueden compensar o aminorar, según sea el caso, ya que con esto se podrá entender la complejidad de la problemática.
¿Qué son los GEI?
Los GEI o gases de efecto invernadero son aquellos que atrapan el calor en la atmósfera, tal y como lo señala la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (EPA, por sus siglas en inglés), y que están vinculados al efecto invernadero, un fenómeno natural, que debido a la actividad humana se ha convertido en una amenaza.
De acuerdo con Iberdrola, el efecto invernadero se presenta cuando ciertos gases presentes en la atmósfera —como son el bióxido de carbono (CO2), metano (CH4), óxido nitroso (N2O), hidrofluorocarbonos (HFC), perfluorocarbonos (PFC) y hexafluoruro de azufre (SF6)— absorben energía térmica del Sol, lo que modifica la temperatura de la superficie de nuestro planeta y permite condiciones aptas para la vida
Determinados gases presentes en la atmósfera retienen parte de la radiación térmica emitida por la superficie terrestre tras ser calentada por el sol, manteniendo la temperatura del planeta a un nivel adecuado para el desarrollo de la vida.
