En los últimos años, las empresas han notado que sus colaboradores no quieren trabajar «para» ellas sino «con» ellas. Es decir, quieren ser parte de una sociedad que sea no solo equitativa sino satisfactoria. Esta tendencia, afirma la CEO J.T. O’Donell escribiendo para el sitio web Inc., continuará en los próximos años porque los millennials se apoderarán de la fuerza de trabajo y porque cada vez son más las personas que trabajan como freelance.
O’Donell, quien es fundadora de la plataforma CareerHMO, enfocada en resolver problemas de la carrera profesional de sus usuarios, dice que las empresas deben considerar convertirse en lifestyle employers o «empleadores de estilo de vida». Este concepto es un cambio respecto al de lifestyle business, que se refiere a una empresa que es creada para responder a las necesidades, horarios y preferencias de su fundador.
Un lifestyle employer, según lo propone la experta, no se limitará a ofrecer comida gratis o un lugar de trabajo cool, sino que debe «crear una oportunidad profesional que permita al empleado sentirse satisfecho y exitoso. Las prebendas y beneficios que la empresa elige ofrecer serán personalizados para asegurar que los empleados tengan la habilidad de vivir una vida más saludable y más feliz.» Todo esto suena a un sueño inalcanzable, pero al parecer ya existen las organizaciones que se están acercando a este ideal.
Clif Bar Company, una compañía que comercializa barras energéticas, es un buen ejemplo de lifestyle employer. Según le explicó su CEO Kevin Cleary a O’Donell, no se enfoca en crear una cultura corporativa, sino una comunidad corporativa. Es decir, un clima en el que sus colaboradores se sientan aceptados e impulsados a ser ellos mismos y donde las decisiones acerca de cómo apoyar a los empleados sean guiadas por la misma comunidad, siempre usando los principios y valores de la empresa como guía.
Aquí siete acciones de Clif Bar Company que O’Donell identificó como características de un buen empleador de estilo de vida:
1. Incentivos por reducir la huella de carbono del traslado. La empresa ofrece a los empleados que usan bicicleta o transporte compartido puntos que pueden canjearse por masajes, acupuntura o peluquería.
2. Horario de trabajo 9/80. Los colaboradores trabajan 80 horas en total en nueve días laborales, para poder tomarse un viernes libre cada 2 semanas.
3. Ejercicio pagado. El gimnasio de las instalaciones cuenta con equipo moderno, dos entrenadores personales de tiempo completo y 30 clases a la semana. Los colaboradores pueden usar hasta 30 minutos al día para ejercitarse, sin que se vean penalizados en sus salarios.
4. Juntas semanales con desayuno. Todos los jueves por la mañana la empresa se convierte en una especie de restaurante, anticipando la junta semanal en la que participa todo el personal y en la cual varios departamentos comparten logros tanto personales como profesionales.
5. 20 horas de voluntariado pagado cada año.
6. Acceso fácil a buenas opciones alimenticias. Además de los productos de la compañía, que están disponibles en toda la oficina, hay un café dentro del edificio que sirve alimentos orgánicos a precios accesibles.
7. Muchos clubes. Clif Bar Company ofrece una gran variedad de grupos y clubes (banda de rock, grupo de ciclismo, etc.) Se impulsa a los colaboradores a conectarse y hacer amistades con sus compañeros, creando así equipos más unidos.
Hay que recordar que no se trata de «sobornar» a los colaboradores, sino de ayudarlos a convertirse en proveedores de servicios fuertes, saludables y sustentables para que así den un mejor servicio a la compañía.