El año pasado en Estados Unidos comenzó un suceso particular: el número de renuncias voluntarias llegó a casi cuatro millones, la cifra más alta desde que se comenzó a llevar este registro en el año 2000. Y este evento, denominado La Gran Renuncia, parece que se está replicando en otros países, pues se ha incrementado el número de mexicanos que abandonan su trabajo.
De acuerdo con el portal Expansión, la bolsa de empleo CompuTrabajo realizó una encuesta, en marzo de 2022, donde halló que, de 3,176 mexicanos económicamente activos, siete de cada diez están considerando moverse de compañía.
Durante el primer trimestre de este año, se reportaron 773,252 de renuncias, de acuerdo con la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE), lo que representa un crecimiento anual de 36% y una diferencia enorme al primer trimestre de 2021, el que se observó la cifra más baja de los últimos 15 años.
Ante este panorama, uno de los retos a los cuales se enfrentan las empresas es evitar la rotación de su personal, por lo que es necesario que primero comprendan los motivos por los que sus colaboradores deciden renunciar a sus trabajos.
¿Qué motiva a los mexicanos a abandonar su trabajo?
Siguiendo con la información de Expansión, las razones que motivan a renunciar tanto a los millennials como a los centennials es la búsqueda de modelos flexibles de trabajo, mientras que los mayores de 45 años valoran acortar la distancia entre su casa y la oficina.
A esto se suman los datos obtenidos por OCCMundial, que mostraron que, durante la semana del 27 de mayo al 2 de junio de 2022, el 28% de los empleados mexicanos renunciaría si en su compañía no existiera el reconocimiento por parte de los líderes.
El 18% lo haría por la falta de salario emocional —ventajas que no necesariamente son monetarias, como flexibilidad o buen ambiente de trabajo— y un 5% por mal liderazgo, carga excesiva de trabajo y un ambiente laboral tóxico, en el que existan superiores que no sepan escuchar las necesidades y preocupaciones del equipo.
Además de eso, el hecho de querer superarse, la discriminación o acoso laboral, el deseo de emprender y las exigencias labores son otras de las razones que los llevan a tomar esta decisión. Por género, las mujeres suelen abandonar sus puestos por el embarazo y otras responsabilidades familiares, que culturalmente siguen repercutiendo en su desarrollo profesional.
En cuanto a salud y bienestar, en 2021 la encuesta del Termómetro Laboral de OCC Mundial preguntó a los usuarios cómo calificarían su salud física y mental. El 48% dijo que ha experimentado falta de motivación en su puesto en los últimos meses; el 38% expresó que padece de agotamiento total; al 11% le falta creatividad en su posición, mientras que un 3% manifestó que es posible que haya sufrido los tres síntomas.
Además, según el Índice de Tendencias Laborales, publicado por Microsoft, el 53% de trabajadores de todas las edades dice que prioriza su salud y bienestar por encima del trabajo, un resultado directo de las experiencias vividas durante los dos años de pandemia. Lo anterior demuestra que si las compañías no respetan la salud de su personal este se irá.
La Gran Renuncia en México
Cuando comenzaron las renuncias masivas en EE.UU., los especialistas en empleabilidad en México no tardaron en alertar que este fenómeno llegaría al país. Incluso, en las perspectivas de capital humano 2022 de varias consultoras se anexaba esta situación como una de las principales preocupaciones para la gestión de personas. Si la retención de talento era la prioridad para este año, entonces ¿en qué se está fallando?
Anthony Klotz, académico de la Universidad de Texas, predijo que un número importante de personas dejaría su empleo una vez que amainara el impacto de la pandemia y hubiera que regresar a “la normalidad” y que esto sucedería por unos años más.
En tanto, Mckinsey & Company menciona que el no comprender de qué están huyendo los empleados y hacia dónde podrían gravitar, los líderes de las empresas están poniendo en riesgo sus negocios. Ahora más que nunca, las organizaciones deben re-definir sus estrategias de atracción y retención, y construir una propuesta de valor que tenga en cuenta varios aspectos.
Por su parte, Alejandra Martínez, responsable de Marketing de Empresas y Estudios de Mercado Laboral en CompuTrabajo, advierte que existe una brecha considerable entre lo que ofrecen las corporaciones mexicanas, en términos de flexibilidad y crecimiento, versus lo que está demandando hoy día el colaborador para mantenerse en su lugar de trabajo.
Al respecto, Roberto Ventura, socio fundador de Neos RH Consultores, afirma que los empleadores están «haciendo oídos sordos» a lo aprendido durante la pandemia y de nueva cuenta están apostando por el modelo presencial. Sin embargo, al hacerlo están alejando al talento clave, al no garantizar condiciones mejores.
De acuerdo con la Organización Internacional del Trabajo (OIT), el trabajo decente sintetiza las aspiraciones de las personas durante su vida laboral e implica un empleo productivo, tener un ingreso justo, seguridad y protección social para las familias, mejores perspectivas de desarrollo personal e integración, libertad para expresarse y participar en las decisiones, la igualdad de oportunidades y un trato justo para todos.
Esto debería ser un motivo suficiente para que las compañías centren la conversación en las acciones a realizar para retener a sus colaboradores.
¡Se debe actuar antes de perder al personal!
Parte de la Responsabilidad Social de las empresas está en reconocer y escuchar los intereses y las demandas de sus empleados para que todos los que son parte de la compañía sientan que están trabajando en un lugar seguro que se preocupa por su bienestar, de esta forma tendrán una ventaja para atraer y retener talento.
Por ello, Ventura menciona que para evitar la rotación de personal y fidelizar, se puede realizar lo siguiente:
- Otorgar aumentos consecutivos de salario.
- Ofrecer esquemas flexibles de trabajo.
- Capacitación continua y crecimiento.
- Prestaciones de ley y superiores.
- Beneficios personalizados.
- Un buen sueldo emocional que garantice que la experiencia dentro de la empresa sea única.
Si tuvieras estos estímulos, ¿renunciarías a tu trabajo?
Si me dieran lo que comentan, definitivamente no renunciaría, por desgracia los directores de las empresas no se dan cuenta que todo ha cambiado de la pandemia para adelante, algunos son gente de edad que se quedaron acostumbrados a las viejas prácticas que les tocaron a ellos y desafortunadamente no quieren cambiar.
Hoy se tienen que abordar todos los cambios y sacar provecho de los mismos si queremos seguir siendo competitivos, el que no cambia con el ritmo que demanda actualmente el mundo, esta condenado al fracaso.