Conocer el mar, viajar en avión o ir a un concierto… estos niños y niñas están cumpliendo sus sueños, gracias a los esfuerzos de responsabilidad social de KIA y su alianza con Make-a-Wish, que esta llevando sus ilusiones más allá de un deseo.
Responsabilidad Social de KIA…
La alianza responsable entre KIA y la organización Make-A-Wish, tiene como principal objetivo, generar un cambio positivo en las niñas y niños porque les brinda una motivación que les permite olvidar por un momento, su circunstancia… puedan despertar su imaginación; crear emociones y empoderarse.
Para hacerlo, KIA apoya económicamente a la fundación Make-A-Wish, cuya meta es transformar vidas, cumpliendo los deseos de los niños y niñas con enfermedades críticas.
“Creamos experiencias únicas para que las esperanzas y los anhelos más valiosos de nuestros niños, se hagan realidad”, señala la organización.
Para KIA Motors México es de vital importancia participar con Make-A-Wish México, una fundación que en nuestro país ha generado más de mil sonrisas en niños que han cumplido sus deseos.
“Por nuestra parte, queremos continuar cumpliendo los sueños en nuestros niños mexicanos, quienes atraviesan por momentos difíciles al soportar una enfermedad desgastante” dijo Horacio Chávez, Managing Director de KIA Motors México.
La armadora coreana lleva contribuyendo con la organización desde 2015, demostrando que en la vida, uno nunca se tiene que rendir. La alianza es importante para ayudar en el tratamiento de los pequeños a través de su estado anímico.
“Esto los impulsa a querer salir adelante, los llena de felicidad y les da una forma diferente de ver las cosas. Así mismo, los Wish Kids nos demuestran lo fuertes y alegres que son”, señalan.
Como Karime, quien pudo cumplir su sueño de pasar unas vacaciones en Cancún, acompañada de su familia…
Soñando a lo grande
De acuerdo con KIA y Make-a-Wish, Karime tiene tiene tan solo 9 años de edad, vive con sus papás y sus 2 hermanos, con los que disfruta de escuchar música; en especial canciones de reguetón.
Salir a pasear con toda su familia es de sus momentos favoritos porque es cuando están más contentos y a ella le hace sentir bien, razón por la que pidió unas vacaciones familiares, para que todos sonrieran mientras disfrutaban de la playa.
De mayor quiere ser doctora, para poder ayudar a los niños que estén pasando la misma situación que ella, pues entiende lo difícil que puede ser enfrentarse a una enfermedad critica.
Una de sus canciones favoritas es “Despacito”, interpretada por Luis Fonsi, la cual no pudo faltar en su viaje familiar a Cancún. Además, Karime ama la película de Avengers y las caricaturas del Chavo del Ocho.
Esa película de superhéroes le gusta mucho porque, a su parecer, nos recuerda que siempre ganan los buenos y lo importante es proteger a las personas inocentes y a sus seres queridos. Su personaje favorito es la Bruja Escarlata, de hecho, le gustaría tener el poder de controlar las cosas como ella, y evitar que su hermano le quite sus juguetes.
Esta historia es tan solo uno de los casos de éxito de la alianza entre Make-A-Wish y la responsabilidad social de KIA, que además de cumplir las ilusiones de estos niños y niñas, busca dejar una huella responsabls en ellos.
Más allá que un deseo
Para Make-A-Wish México cumplir un deseo puede cambiar la forma en que un niño enfrenta su enfermedad.
“Al hacerse realidad eso que más anhelan, ayuda a los niños a dejar atrás sus limitaciones; a las familias, a sobreponerse ante la adversidad; a la comunidad, a experimentar alegría y lo más importante, es que los deseos pueden mejorar la calidad de vida de los niños”, señala la organización.
Además de que esta comprobado que un deseo cumplido por un niño o niña, les genera un impacto positivo y fuerza que les permite luchar contra las barreras a las que se están enfrentando.
La organización, también comparte que en 2015, se realizó un estudio para medir precisamente lo que fomenta un sueño cumplido en un paciente y los resultados arrojaron que un deseo brinda: esperanza para el futuro; fortaleza para enfrentar los retos y transformación para convertir lo imposible en inolvidable.
“Los resultados revelaron que los niños tuvieron mejoras tanto en su salud física como en la emocional y los ayudaron a remplazar el miedo por confianza, la tristeza por alegría y la ansiedad por esperanza”, compartió.
Por otra parte, los sueños cumplidos, también influyen en las personas que los rodean.
La fundación dice que definitivamente hay un cambio de actitud positivo en toda la familia. Se sienten acompañados y apoyados por el equipo de voluntarios. El 96% de los padres, dijeron que el deseo fortaleció a sus familias.
“Creemos en el poder transformador de un deseo y nuestra meta es ambiciosa: Cumplir el deseo de cada niño elegible, diagnosticado con una enfermedad que pone en riesgo su vida”, comparten.
Es por ello, que el objetivo de Make-A-Wish sumado a los esfuerzos de responsabilidad social de KIA, es una esperanza para muchos niños y niñas y sus familias.