Aún en los tiempos que corren, la responsabilidad social se mantiene firme en principalmente aquellas empresas que están constatando los beneficios que les reporta en aspectos importantes para su competitividad. Estas empresas comprueban que la RSE les ayuda a mejorar su reputación, les fortalece sus políticas de RRHH, les hacer ser más eficientes, especialmente cuando consiguen ahorros energéticos, o de cualquier otro tipo, y también les cataliza la innovación.
No es fácil poder concretar en qué medida la apuesta que estas empresas están haciendo por la RSE las hace más competitivas. Pero, un número creciente de líderes empresariales consideran a la RSE más como una inversión que un coste, puesto que la aprovechan para la diferenciarse y para crecer. Saben que ésta será la empresa que triunfará en el siglo XXI.
Son también tiempos en los que, aún más, se constata que la RSE es un reto de liderazgo. Esto ha hecho que dichas empresas hayan ido desarrollando la mejor forma de integrar la RSE en los mecanismos formales de gestión ejecutiva de la compañía y también hayan abordado cómo gobernar desde su consejo de administración los objetivos y resultados del plan de transformación hacia una empresa responsable.
Compañías como Telefónica, Acciona, Danone o grupo Pascual, entre otras varias, han optado por crear una comisión dedicada a ética y responsabilidad en el seno del consejo de administración. Son comisiones conformadas por tres o cuatro consejeros que en algunos casos tienen en exclusiva esa área de delegación y en otras ocasiones la comparten con ámbitos diferentes. Otras compañías han buscado soluciones más sencillas, encargando a uno de sus consejeros el seguimiento de los temas de RSE y, sobretodo, la sistematización de su tratamiento en el marco anual de reuniones del consejo.
Inditex o Meliá son ejemplos de compañías que han preferido dotarse de un consejo asesor de sostenibilidad- conformado por personas y expertos que provienen de diferentes grupos de interés que son críticos para la empresa en este ámbito- que reporta directamente al consejo de administración o un miembro del mismo que lidera los temas de RSE.
En todo caso, lo que están constatado estas compañías es que sí se quieren ser empresas responsables y competitivas no pueden dejar de gobernar el proceso de transformación que esto comporta desde el consejo de administración.
Fuente: Blog El País