El sismo del pasado 19 de septiembre dejó, además de cientos de víctimas, daños importantes en la infraestructura de varias casas, edificios, oficinas y negocios.
Entre ellos, también resultaron afectadas pinturas de caballete que datan del siglo XVII y que hoy son restauradas por especialistas del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
Las obras, «La asunción de María», «La adoración de los pastores» y «Los desposorios de la Virgen» pertenecen a la Capilla de Santa María de la Asunción del Estado de México y que actualmente están siendo atendidas por especialistas dirigidos por Irlanda Fragoso Calderas, directora de Conservación e Investigación, y María Cristina Noguera Reyes, responsable del Taller de Pintura de Caballete de la Coordinación Nacional de Conservación del Patrimonio Cultural (CNCPC).
Pinturas de caballete que datan del siglo XVII y que fueron dañadas por el sismo 19S, están siendo restauradas por especialistas del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
Además de esas obras, los encargados también están dando restauración a cinco medallones de escenas de pastores y fragmentos de la puerta del sagrario que tiene pintado el rostro de Cristo.
Dichas piezas son muy importantes para la comunidad de Ocuilan y ellas se encontraban en el altar dirigido a la Virgen, el cual había sido restaurado poco antes del terremoto.
Cuando éste se presentó, el retablo se colapsó al caer la cúpula y quedó sepultado bajo los escombros, ocasionando que se fragmentara en cientos de partes y las pinturas se desgarraran y arrugaran.
De acuerdo con datos de El Universal, en el traslado se incluyeron tanto las pinturas sobre tela como las escenas representadas en madera del retablo principal de la Capilla de Santa María.
Hasta hoy, los especialistas trabajan en corregir el plano de cada una de las obras y atender las arrugas causadas por el siniestro. La restauración de las todas las obras de arte terminarán a finales de año, fecha en que se reintegrarán los bienes a la comunidad de Ocuilan de Arteaga, Estado de México.
Para Irlanda Fragoso, el reto es realizar un proyecto integral de restauración y conservación de las pinturas, con el fin de conocer más acerca de los materiales de la pintura novohispana de la región.
«Debido a que se trata de un solo conjunto pictórico, en el traslado se incluyeron tanto las pinturas sobre tela como las escenas representadas en madera del retablo principal de la Capilla Santa María, para realizar una restauración integral y con resultados que visualmente sean homogéneos».
«Será un reto técnico que nos llevará a explotar técnicas de conservación y restauración de la pintura sobre tela, que permitan nuevamente una lectura de sus principales valores, los cuales se han visto mermados por su grave estado de conservación».
De acuerdo con la restauradora Martha Amparo Fernández Ortiz, una de las especialistas, éstas obras quedaron comprimidas y una de ellas perdió fragmentos de óleo original, mientras que algunos medallones sufrieron abrasiones.
Para iniciar con el registro, ella junto con su equipo fotografiaron las piezas para documentar el daño con el que ingresaron.
Los especialistas se encuentran trabajando en la corrección del plano de cada una de las obras, además de las arrugas causadas por el sismo.
