La tarea de la mexicana Rosario Martínez en la planta de Toyota en Mississippi es asegurarse que ésta cumpla los más altos estándares de calidad ambientales.
Como especialista de ingeniería ambiental ha logrado pulir el sistema de reciclaje de residuos de producción, al grado que esta fábrica en la que labora es la referencia en temas de sustentabilidad para las otras que la compañía japonesa tiene en Estados Unidos.
«Con una producción estable, mi labor consiste en trabajar con los operarios, quienes son los que generan los residuos, para analizar los procesos y ver cómo estos pueden minimizarse o reducirlos así como el cómo desecharlos», dijo en entrevista con Grupo REFORMA.
Nació en Michoacán y creció en Guanajuato, lugar donde estudió la carrera de Ingeniería Química. Se fue a Estados Unidos para trabajar en una empresa del sector automotriz en Michigan, pero con la crisis del 2008 hubo una reestructuración y prefirió salir.
Este mismo año, Toyota anunció la construcción de la planta en Tupelo, Mississippi, y Rosario Martínez se unió al equipo desde el arranque de la planta en el desarrollo de programas de manejo de residuos.
«La compañía tiene un sistema de administración ambiental muy fuerte, tiene una filosofía que a un año del arranque de la planta el sistema de desechos tiene que funcionar», precisó la ingeniera.
Entre las metas que ha alcanzado es lograr que el Gobierno estatal haya reconocido la instalación por su eficiencia en manejo energético y de desechos, la creación de métricas para medir ambientalmente la producción nacional e incluso la creación de un jardín para la reproducción de plantas e insectos endémicos.
Estar en la compañía le ha dejado una serie de enseñanzas, entre las que están buscar mejorar constantemente la manera en la que se puede elevar la calidad del producto para beneficio mutuo.
«Toyota tiene sus reglas para trabajar así que cuando entras tienes que tener la mente abierta para aprender porque muchas veces uno considera que es experto, y aunque en la parte técnica lo seas, necesitas tener un estándar de trabajo para poder llevarlo al siguiente nivel», dijo Martínez.
Esta planta inició producción en 2011 y tiene capacidad para fabricar 170 mil unidades al año, con 2 mil empleados en la planta.
Para lograr esta cantidad, Toyota tiene un esquema dentro de la fabricación, cuyo concepto se define como ver y resolver qué implica que la cadena de producción puede pararse en cualquier momento si se encuentra un fallo.
Fuente: Reforma
