El liderazgo e impacto económico de la Región de Antofagasta en el desarrollo del país es algo que nadie se atreve a discutir, sobretodo hoy que vemos como la baja en inversiones del sector minería impacta negativamente en el crecimiento económico de Chile. Al alero de una pujante y vanguardista industria minera y de servicios, nuestra región ha impulsado en forma constante una serie de iniciativas y políticas en los más diversos tópicos, con la finalidad de agregar valor al ecosistema económico y productivo de nuestro territorio y al país en su conjunto.
En este sentido, el “Know How” de la industria minera en materia de Responsabilidad Social Empresarial es de clase mundial, ya que se percibe en el tiempo una real y concreta preocupación y acción de las compañías mineras por integrar a su gestión corporativa ámbitos tan sensibles y complejos como comunidad y medio ambiente, entre otros. Basta con revisar la bibliografía y/o recorrer la región para darnos cuenta del quehacer de las grandes empresas en la materia.
Ahora bien, como Corporación Incuba2 creemos que es tiempo de llevar la Responsabilidad Social Empresarial en la Región de Antofagasta a una estado superior, a uno que nos permita proyectar y concretar conjuntamente una visión de mediano y largo plazo para avanzar decididamente en la generación de un territorio sostenible.
Para ello creemos imprescindible modificar la mirada en torno al rol que juegan las pequeñas y medianas empresas de la región, pues al revisar las cifras históricas que arrojan iniciativas como el “Cluster Minero” y otras tantas, nos daremos cuenta que sobre el 70% de las empresas impactadas positivamente por estas iniciativas son foráneas. Es decir, poco y nada queda acá.
Por lo mismo, desde nuestra experiencia y conocimientos derivados de una década de trabajo sostenido en la zona, queremos invitar a los diversos actores de la industria minera a rediseñar y establecer una forma de trabajar con las Pymes locales, incorporándolas en sus programas RSE con proyectos enfocados en el emprendimiento y la innovación empresarial. Y de esta forma, generar capacidades y conocimientos específicos que agreguen valor- con actores locales- a la gran minería de nuestra región y, por ende, a todos sus habitantes.
Por nuestra parte, seguiremos desarrollando un sostenido trabajo con la base empresarial, seguiremos siendo actores claves a la hora de articular y apalancar esfuerzos y recursos, con Centros de investigación y Universidades, con organismos públicos (CORFO, Sercotec, Municipios y GORE) y las empresas mandantes de la zona.
Nuestra región está obligada a liderar la economía nacional, es imperativo que todos los sectores de nuestra sociedad se reinventen y se atrevan a impulsar nuevas acciones que permitan establecer un territorio realmente sustentable en base a las potencialidades y capacidades emprendedoras de nuestra base empresarial local y, con ello, impactar positivamente en el empleo, las inversiones y el encadenamiento productivo de la Región de Antofagasta y de Chile.
Fuente: mba & educación ejecutiva