Lala, una de las más fuertes competidoras en el mercado de lácteos en México, se ha reestructurado a nivel interno en los últimos años para dar mayor atención a la responsabilidad social.
Luis Rey Delgado, subdirector de Comunicación y Relaciones Públicas de Lala, explicó que tienen una red de responsabilidad social integrada por representantes en las 18 plantas que la compañía tiene en México, la cual es presidida por el Comité de Responsabilidad Social, conformada por tres o cuatro personas, entre ellas Rey Delgado.
Así, desde cada planta surgen las prioridades a atender, que pueden ir desde la necesidad de una vialidad hasta liberar a las tortugas.
La empresa, que recientemente publicó su “Informe de Responsabilidad Social 2011”, bajo la metodología GRI 3.1, no descartó alinearse pronto a la versión 4, que establece los reportes integrados (financieros y de sostenibilidad) en uno solo.
“Lala no emite un reporte financiero como tal, sino que comunica los balances con un video a socios y accionistas, sí nos cuesta trabajo informar (de manera pública) los datos financieros, pero es la tendencia y nos vamos a ir sumando; si damos el paso de cotizar en la Bolsa, con mayor razón”, anticipó.
—¿Cómo miden el retorno que les deja la responsabilidad social?
Las empresas continúan sin determinar con precisión el capital social; necesitamos encontrar rubros duros en imagen y reputación.
En la empresa realizamos un análisis trianual con el que preguntamos a detallistas, amas de casa, estudiantes, colaboradores, etcétera, lo que opinan de la compañía.
Rey Delgado aseguró que el trabajo que hacen para crear un vínculo con el consumidor y cubrir sus exigencias es la clave con que enfrentarán los nuevos reacomodos en la industria lechera: “El éxito de una empresa no está en el sistema de distribución, sino en qué tanto ésta puede adaptarse a las necesidades de clientes cada vez más exigentes e informados”.
—¿Cómo han jalado a sus proveedores a la responsabilidad social?
“En la región de La Laguna, de dónde proviene 80% de nuestra leche y a la que le debemos el nombre, hemos creado una alianza con empresas como Peñoles, Modelo y Cemex, entre otras, para detectar proveedores comunes (de refacciones, instalación eléctrica, materia prima) y los invitamos a alinearse con prácticas sostenibles, con el compromiso de las empresas de atender juntas alguna necesidad en las comunidades”.
—En el contexto de violencia, ¿cómo garantizan la seguridad de sus colaboradores?
Actualmente padecemos robos a camionetas, tráileres, centros de distribución, extorsiones a directivos, a gerentes. Hemos mejorado nuestros sistemas de seguridad en instalaciones, con cámaras o alarmas, y lanzado una campaña interna para el autocuidado de los repartidores, desde cómo manejan, cuándo cambiar de ruta, cómo comportarse si un grupo los detiene, que pongan las manos en el volante, en fin. Tenemos 6,000 rutas, en algunas hemos metido vigilancia especial, otras las hemos cambiado o cerrado; Tamaulipas y Guerrero han sido los focos rojos.
Rey Delgado aseveró que áreas de oportunidad en responsabilidad social hay muchas. El año pasado, dijo, contrataron una empresa para el manejo de sus residuos electrónicos e invitaron a los empleados a llevar a la empresa los celulares, radios o computadoras que ya no utilizaran. Los recursos obtenidos -pues la empresa les pagó por ellos- se destinaron al área de voluntariado corporativo.
Fuente: eleconomista.com.mx
Por: Alejandra Aguilar y Hugo Valenzuela
Publicada: 17 de Septiembre de 2012