La responsabilidad social no se reduce a ejecutar acciones verdes o sociales que le brinden reputación corporativa a la compañía. Las acciones, como hemos dicho muchas veces, deben ser transversales a toda la organización y por tanto estratégicas. Aquí un buen ejemplo en cadena de valor.
Como parte del compromiso de Sabritas con la protección de los recursos naturales, la empresa comenzó la sustitución de película plástica para el emplayado, por una nueva tecnología de contención de carga con cinta estirable Scotch® de 3M®, lo que le ha permitido reducir significativamente los residuos producto del emplayado. Esta cinta se pega al contacto con suficiente fuerza y adhesión para fijarse a la base del pallet y así empezar a envolver la carga, conforme se va envolviendo el pallet la cinta se elonga e incrementa su fuerza de tensión de estiramiento. Cuando se libera la tensión aplicada, la memoria elástica contrae la cinta lo suficiente para apretar la carga sin aplastar el empaque.
Las ventajas de trabajar con este sistema son muchas; entre otras, evitar que las tarimas se peguen dentro de los racks, reducir el espacio de almacenamiento del material para emplayado, ahorros al disponer de las máquinas envolvedoras en comodato, reducción de desechos, reducción de costos del 12% y eficientar la actividad al reducir en 12 horas los tiempos muertos.
En esta ejecución lo que podemos ver es que 3M está comprometida con la responsabilidad social al generar productos que benefician estratégica y medioambientalmente a las empresas en cuanto a sus procesos diarios. Así mismo, es posible observar cómo Sabritas, manteniendo el mismo enfoque estratégico de RSE, se preocupa por implementar acciones en su cadena de valor que le permitan tener ahorros en diferentes puntos, no sólo monetarios sino de tiempo, desechos, energía, etc.
Esto es entender la RSE de forma estratégica y no simplemente como una herramienta para ganar reputación corporativa gracias a ejecuciones lucidoras… ¿Su empresa ya procede así?