Saborear, escuchar y tocar, son acciones que podemos realizar a través de los sentidos. Sin embargo, existen dos sentidos particulares que son herramientas para el fomento educativo, lo que es clave para acceder a una mejor calidad de vida en el futuro. Por esta razón y más, procurar la salud visual es elemental.
En nuestro país, de acuerdo con la Secretaría de Salud, existen muchas personas con problemas visuales como: miopía, hipermetropía, astigmatismo, presbicia, catarata senil, degeneración macular, glaucoma y más. Estos afectan a gran cantidad de mexicanos y mexicanas, y una de sus tantas consecuencias que tienen es la falta de visión, lo que deriva en falta de atención y dificultades de aprendizaje.
Empero, a través de un diagnóstico adecuado y a tiempo, es posible darle solución a algunas de ellas. Es por esto que existen organizaciones y empresas que tienen el propósito de mejorar aquellos problemas que se pueden resolver por medio del uso de lentes, y mediante su Responsabilidad Social (RS) se han sumado a brindar herramientas para mejorar esta problemática.
Herramientas para el fomento educativo: la vista
En nuestro país, de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), el 27.2% de la población utiliza lentes y se distribuyen por edad de la siguiente manera:
- 3 a 14 años: 8.6%
- 15 a 29 años: 19.2%
- 30 a 49 años:24.5%
- 50 a 64 años: 58.4%
- 65 años y más: 57.6%
Si bien estos datos reflejan que a mayor edad es más frecuente el uso de lentes, también resalta que entre los 3 a los 29 años representan casi el 30% de población que requiere utilizar lentes y las personas en este rango de edad se encuentran en etapa escolar.
Ante ello, Fundación Gigante —el brazo social de Grupo Gigante— ha realizado una alianza con la Fundación Ver Bien para Aprender Mejor con la finalidad de mejorar la salud visual de niños, niñas y jóvenes para brindarles una de las herramientas para el fomento educativo.
Dicha alianza nació en 2005 y gracias a ella han entregado 194,169 lentes beneficiando a:
- Niñas y niños que estudian primaria y secundaria en escuelas públicas de todo el país
- Colaboradores y familiares directos de Grupo Gigante
Este aporte fortalece la salud visual y facilita el trabajo del talento con el que cuenta la empresa. El compromiso de ambas fundaciones es tal, que nada los ha detenido.
De hecho, durante la pandemia, también hicieron entrega de 133 lentes. Dicho aporte resultó fundamental, ya que si bien las escuelas estuvieron cerradas, las clases en línea iniciaron y estar frente a una computadora, tableta o celular, forzó la vista de cantidad de educandos, por lo que procurar salud visual fue imprescindible.
Estas acciones contribuyeron, además, a fortalecer dos ejes rectores de Fundación Gigante: Educación y Salud, también ayudo a resaltar la importancia de no dejar de lado esta necesidad básica, así como el desarrollo escolar de niños, niñas jóvenes y la labor de los colaboradores. En ese sentido, es importante destacar la relevancia de prevenir y realizar acciones oportunas en pro de la salud visual, en especial en etapas formativas.
¿Qué dice? No veo bien…
Esta pregunta se la hacen cantidad de personas, situación que afecta su vida cotidiana de las siguientes maneras:
- Aprendizaje: Problemas para visualizar el pizarrón, entender instrucciones o simplemente realizar bien sus labores en caso de trabajar.
- Socialización: Al no poder observar las expresiones faciales, no ver adecuadamente dificulta la socialización con compañeros de trabajo o amigos en la escuela.
- Funciones motoras: Es frecuente que existan tropiezos derivados de la dificultad visual y con ello no desarrollarse de forma adecuada.
Por lo que apoyar a resolver estas problemática genera un impacto importante en cada uno de los beneficiarios, que ahora, gracias a sus nuevos lentes… ¡Podrán ver todo lo que deseen!