La quinta edición del Informe Forética sobre la evolución de la RSE en España revela una consolidación del fenómeno a pesar de la crisis a la vez que pone de manifiesto una brecha más profunda entre las empresas más pequeñas y las medianas y grandes en lo que respecta a su actitud y también a su práctica de la Responsabilidad Social.
“El cambio de paradigma que se está produciendo en la economía a nivel mundial obliga a las empresas, ciudadanos y Gobierno a convertirse y a optar por la responsabilidad como la respuesta imprescindible”. Así lo declaró ayer el Ministro de la Presidencia, Ramón Jáuregui, en la clausura del acto de presentación del Informe Forética 2011 sobre la evolución de la RSE en España.
“El principal objetivo en estos momentos es recuperar la economía, generar empleo y que éste sea de calidad”, resaltó Jáuregui. “La pregunta no es qué hacen las empresas con sus beneficios, sino cómo los generan; en última instancia, las empresas sólo son rentables si son éticas”, concluyó.
Principales conclusiones del estudio
Uno de los principales valores de la edición 2011 del Informe Forética reside, según sus autores, en que “desde el punto de vista socioeconómico, ha coincidido con uncontexto de cambio brusco en los mercados financieros, un momento de shock sin precedentes que ha puesto a prueba la madurez del fenómeno de la RSE en sus circunstancias más extremas”.
A juicio de los autores, tanto el mayor grado de escepticismo como los recortes en algunas actividades empresariales y en alguna práctica de consumo entran dentro de la normalidad y responden a una adaptación a la coyuntura. “Nunca antes había habido una falta de confianza ciudadana en el estado de la economía y en el sistema político tan acusada”, señala el Informe en base a datos del CIS. En este contexto, “sorprende positivamente el grado de madurez de la RSE en el discurso empresarial”, señaló Silos destacando que 6 de cada 10 empresas ya conocen la RSE.
Los efectos de la crisis en la RSE
Según el Informe Forética 2011, una de cada tres empresas españolas ha dejado de realizar actividades de RSE como consecuencia directa de la situación económica. Los autores del estudio ponen de relieve la fortaleza de la responsabilidad social “si se tiene en cuenta que desde la anterior edición del informe se han destruido 2,3 millones de puestos de trabajo y 130.000 empresas”. Nuevamente, el tamaño de las organizaciones es determinante: la tasa de abandono de actividades RSE de manera permanente (sin previsión de retomarlas), es mucho mayor en el caso de las pequeñas empresas –un 18%- frente a tan solo el 3% en el caso de las medianas y grandes.
Otro de los impactos del ciclo económico en el sentimiento empresarial hacia la RSE tiene su reflejo en las prioridades de las prácticas en las organizaciones. El objetivo de “crear empleo” escala posiciones desde 2008 y se sitúa en segundo lugar solo por detrás de “respetar los derechos humanos y la intimidad de sus trabajadores y proveedores”, en detrimento del respeto al medio ambiente.
Otro de los temas a los que da seguimiento el Informe Forética es a la integración estratégica y operativa de la RSE. En la actualidad, solo un 5% de las empresas españolas cuenta con una política de RSE formalizada por escrito y un 11% se encuentra en proceso de formalización. En términos de integración y desempeño, quien formula la estrategia de RSE en la empresa es la Dirección General, en un 44,5% de los casos, seguido del Consejo de Administración, con un 25,4%. A nivel operativo, se aprecia una consolidación de la figura específica del director de RSE -45% de los casos-, que gana peso específico en las organizaciones, ya que en un 73,6% de los casos suele estar integrada en el Comité de Dirección.
Aquí puede ver la Versión ejecutiva del Informe
Fuente: Foretica.org
Publicada: 4 de marzo de 2011.