Sus ojos azules, desafiantes como espadas frente a lo que considera injusto, le han puesto en el camino de los grandes intérpretes, pero también le han valido para ser tachado como un rebelde e inconforme.
Sin embargo, Sean Penn, nacido hace 50 años en Santa Mónica, California, tiene bastante claro lo que más le satisface hacer en la vida: “Aparte de contemplar a mis hijos sonreír, nada me gusta más que estar en la carretera rodando una película”, decía el actor durante la promoción de su última película como director, Into the Wild (2007).
Penn es poco locuaz con los medios, y su presencia en los mismos es debida, en muchas ocasiones, a asuntos ajenos a su carrera profesional, desde su rechazo a la guerra de Irak y a la gestión del presidente George W. Bush, a la atención por la situación política en Venezuela y Cuba, por citar sólo un ejemplo.
A veces se olvida que Sean Penn es uno de los actores más dotados de su generación. El oficio lo aprendió de sus padres: Leo Penn, director de cine y televisión, y su madre, la actriz teatral Hielen Ryan. Destacó pronto sobre las tablas y en la pantalla de televisión.
El actor ha trabajado con directores de la talla de Woody Allen, Brian de Palma, Neil Jordan, Tim Robbins, Clint Eastwood o Alejandro González Iñárritu.
Los galardones que ha recibido le han encumbrado a lo alto de su profesión: un premio de la Academia y un Globo de Oro por Mystic river (2003), de Clint Eastwood; otro Oscar por Milk (2008), de Gus van Sant; un Globo de Oro por Sweet And Lowdown (2000) y dos premios del Sindicato de Actores por Milk y por Mystic river (2003). Así que su ego está bien servido en este aspecto.
En la filmografía más reciente de Sean Penn destacan títulos como 21 Grams (2003), de Alejandro González Iñárritu; The Assassination of Richard Nixon (2004), de Niels Mueller; o The Interpreter (2005), de Sidney Pollack.
Literatura y cine
Sin embargo, el entorno de Penn siempre ha estado vinculado al mundo literario, a un círculo ajeno al espectáculo. En este sentido, escritores que han influido en su vida son el dramaturgo David Rabe, el novelista Harry Crews, y Charles Bukowski, hasta su muerte en 1994.
“Éste y su mujer fueron como unos padres. Estábamos juntos muy a menudo, en los 80, y llenaron una ausencia”, recordaba el actor hace algunos años.
“La idea de un viaje a través de los libros me seduce, puesto que así enfoco mi vida: entre libros”, analizaba el actor en otra entrevista, para concluir: “Cada etapa de mi vida corresponde a la lectura de un libro. Empecé por Salinger; luego, Dostoievski. Crimen y castigo me encantó y los monólogos de Rasholnikov sobre la razón y la locura desempeñaron un papel decisivo en mi carrera de actor”.
Penn ha compaginado la interpretación con la tarea de director. Ha dirigido cintas como The Indian Runner (1991); The Crossin Guard(1995); The Pledge (2001) o Into the Wild (2007), además de uno de los cortometrajes que integran la película colectiva 11.09.01 (2002), sobre la destrucción de las Torres Gemelas de Nueva York.
Su vida familiar ha estado marcada por su relación con la actriz Robin Wright, que comenzó en 1989 y acaba de terminar. La pareja tiene dos hijos en común, Dylan Frances y Hopper Jack.
Además, resultó muy duro para él la pérdida de su hermano y también actor, Chris Penn, en 2006, a causa de la ingesta “múltiple y accidental de medicamentos”. En el olvido queda su tormentoso matrimonio con Madonna, que duró cuatro años.
Volviendo a su compromiso social, el actor ha declarado a la revista Vanity Fair, hace dos meses: “No tenía tiempo para comprometerme con nada de forma real en lugares como Irak, excepto denunciar la guerra. Pero ahora estoy soltero y puedo echar una mano”.
El actor, quien se ha ido implicando en causas que le han dado más de un dolor de cabeza, ahora se halla totalmente centrado en la ayuda a la reconstrucción de Haití, que fue sacudido por un terremoto.
Fuente: El Universal; Kiosko, p. 6
Autor: Ricardo Albillos
Publicada: 22 de Agosto 2010
