Un 62,8% de las mujeres marroquíes en edades comprendidas entre los 18 y 64 años han sufrido recientemente algún tipo de violencia de género, según la primera encuesta sobre este fenómeno que se presenta en Marruecos.
La Encuesta Nacional de la Prevalencia de la Violencia de Género fue presentada hoy en Rabat por el Alto Comisariado de Planificación (HCP), organismo público de estadísticas y censos.
De las 9,5 millones de mujeres en esa franja de edad en el país, casi seis millones de ellas sufrieron violencia, y, según el estudio -elaborado entre junio de 2008 y junio de 2009-, 3,8 millones viven en la ciudades y 2,2 millones en el campo.
La encuesta divide en cuatro categorías los tipos de violencia de género: la psicológica (48% de víctimas), sexual (8,7%), física (15,2%), económica (8,2%), y añade aquellas agresiones contra las libertades de la mujer (31%) y las ligadas a la aplicación de la ley (17,35).
Además, el sondeo, efectuado a 8.300 mujeres, se centra en la violencia en el ámbito conyugal (55%), extra conyugal (47,4%), lugares públicos (32,9%), centros educativos (24,2%), trabajo (16%) y familia (13,5%).
Por otro lado, tanto las víctimas como los agresores suelen ser en su mayor parte jóvenes, y el informe refiere que en el caso de los lugares públicos seis de cada diez agresores son menores de 35 años.
Financiado por el Fondo de Naciones Unidas para la Mujer (UNIFEM), el estudio destaca también que en el ámbito laboral, el índice de violaciones sexuales a mujeres divorciadas es tres veces superior que en el caso de las solteras.
El responsable del HCP, Ahmed Lahlimi Alami, aseguró que el riesgo de que una mujer sea agredida en una zona urbana es mayor que el que corre una fémina que vive en el campo.
«A pesar de los progresos significativos, esta mitad de la población continúa sufriendo de analfabetismo, falta de escolarización, y de niveles de inactividad y paro mucho mayores de los que padecen los hombres», sentenció Alami.
Asimismo, argumentó que Marruecos es una «sociedad en transición que va de una sociedad tradicional a una moderna, y la mentalidad no evoluciona a la misma velocidad».
Fuente: El Mundo.es
Publicada: 11 de Enero 2011