El Secretario de medio ambiente estimó que para junio o julio se empezarían a implementar proyectos.
El titular de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), Juan José Guerra Abud, anunció este viernes 28 de febrero que será en mayo próximo cuando se celebrará una reunión en Querétaro para avanzar sobre propuestas concretas de organizaciones no gubernamentales y académicas de EU, Canadá y México, en torno a la problemática del declive en números y hábitat de la mariposa monarca, símbolo del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).
Éstas serían presentadas al grupo de alto nivel integrado por autoridades de los tres países, quienes se reunirán en Canadá en julio en un encuentro de cooperación ambiental.
Guerra Abud dio a conocer que una vez que esto se haya elaborado, de manera personal se lo presentará al presidente Enrique Peña Nieto para su aprobación, “y esperemos que a más tardar a mediados de este año estemos empezando a implementar las medidas suficientes para preservar a la mariposa Monarca”.
En conferencia de prensa el funcionario indicó que en México, “el hábitat de esta mariposa no ha sido tocado, pues no se presenta tala”, aunque si hay actividades agrícolas que afectan la migración de la especie.
Anunció que hoy mismo viajará a la zona de la mariposa Monarca para sostener un encuentro con las autoridades de ambos estados e incorporar a esta reunión a campesinos y personas que se dedican a labores agrícolas, con el propósito de que se sumen a estos esfuerzos a favor de este lepidóptero.
Tras reunirse en la ciudad de Toluca el pasado miércoles 20 de febrero, los líderes del TLCAN, Enrique Peña Nieto, Stephen Harper y Barack Obama anunciaron su compromiso para atender la problemática de la monarca con la creación de un grupo de trabajo trinacional.
Mientras que en años pasados se atribuía la disminución de números a la tala en la Reserva de la Biosfera Mariposa Monarca, ahora se sabe que la principal causa del declive es el incremento de los cultivos de maíz y soya transgénicos en el Cinturón de maíz de Estados Unidos, que atraviesa la ruta migratoria del colorido insecto.
El glifosato en el herbicida usado para rociar los campos transgénicos resulta fatal para el algodoncillo, única planta de la que se alimenta la oruga monarca y misma donde se reproduce.
Según las recomendaciones del simposio internacional de la mariposa monarca, llevada a cabo en Morelia, México, en octubre de 2013, y la de varios reconocidos científicos, las acciones específicas deben incluir:
En EU y Canadá
• Proporcionar herramientas y lineamientos para guiar los esfuerzos de conservación de las monarca, tales como la promoción de regímenes de poda, quema, adelgazamiento y cosecha diseñados para restaurar la estructura de los ecosistemas y la composición de las especies; la propagación de algodoncillo para aumentar la disponibilidad de semillas; la inclusión de algodoncillo en los sembradíos para la restauración de hábitat; y la dispersión de semillas de plantas nativas, incluyendo el algodoncillo, a lo largo de rutas y vías de comunicación.
• Apoyar los programas agrícolas estatales y federales que protejan y restauren el hábitat para el forrajeo, cría y migración de la mariposa monarca, como la siembra de semillas mezcladas que incluyan algodoncillo y plantas de néctar, y destinar tierras de producción a programas como el de Conservación de Reservas.
• Disminuir los efectos nocivos de los insecticidas mediante la instrumentación de mejores prácticas para el manejo integral de plagas, limitando el uso de neonictinoides (un tipo de insecticida) utilizados en la producción agrícola, así como reducir la exposición indirecta de la monarca.
En México
• Proteger las zonas de amortiguamiento de la reserva monarca de la explotación forestal no sostenible, incendios, pastoreo y expansión agrícola.
• Garantizar la vigilancia efectiva durante todo el año y la aplicación de la ley para evitar la tala a pequeña y gran escala en las zonas núcleos de la reserva monarca.
• Aumentar y coordinar las acciones relacionadas con los pagos por servicios ambientales a las comunidades locales por parte de las autoridades federales y estatales, como una inversión a largo plazo que fomente actividades económicas sostenibles.
• Instrumentar un plan integral regional para crear (y mantener) empleos, mejorar y expandir la educación y mejorar los servicios básicos relacionados con la salud, la electricidad y el agua.
Fuente: Animal Político
