Aunque echar la culpa de tu bajo rendimiento al vago de tu compañero no te justifica, un estudio reciente publicado en Phsychonomic Bulletin and Review muestra que sentarte al lado de un compañero concentrado en su tarea puede influir positivamente en tu propio rendimiento.
“La presencia de otra persona influye en nuestro comportamiento laboral”, explica el equipo investigador después de tener 38 participantes trabajando cerca en una tarea.
Demostró que, cuando una parte del equipo tiene que trabajar duro, el resto de sus compañeros también trabajan más concentrados aunque su trabajo sea mucho más sencillo.
El único inconveniente es que no hay un indicador claro de si la calidad del trabajo producido por la persona con la tarea sencilla es necesariamente mayor cuando se sientan al lado de un compañero concentrado, ya que esto hace que se concentren más en terminar su trabajo.
En cualquier caso, todo lo que sea que mejore la productividad, bienvenido sea.
“Estos resultados son una primera prueba convincente de que el exceso de trabajo es contagioso” escribió el equipo belga de investigación.
Fuente: ELLE