Pese a que casi nueve de cada diez ejecutivos reconocen que la biodiversidad es importante para el planeta, protegerla sigue ocupando un lugar secundario en la agenda empresarial, ya que actualmente se hace más hincapié en la lucha contra el cambio climático, según el reciente informe del Instituto de Investigación Capgemini, Preservar el tejido de la vida: Por qué la pérdida de biodiversidad es tan urgente como el cambio climático. Asimismo, actualmente solo el 16% de las organizaciones ya ha evaluado el impacto en la biodiversidad de su cadena de suministro y únicamente el 20% el de sus operaciones.
Aunque el cambio climático y la pérdida de biodiversidad están estrechamente vinculados, la mayoría de las organizaciones se centra actualmente en las cuestiones climáticas, y un gran porcentaje de los ejecutivos cree que la biodiversidad tiene menor prioridad que el cambio climático. De hecho, un poco más de la mitad de los ejecutivos de todo el mundo considera que el papel de una empresa privada no es ocuparse de la biodiversidad, sino limitarse a cumplir las regulaciones al respecto. Esta cifra llega incluso a 78% en Italia y 75% en Japón.
Se percibe una de falta de urgencia entre los ejecutivos a nivel mundial
Casi la mitad (47%) de los ejecutivos considera que la pérdida de biodiversidad es un riesgo a mediano plazo para sus empresas y el 30% lo percibe como un riesgo a largo plazo (2050), mientras que solo el 17% lo considera una preocupación inmediata, con diferencias regionales significativas en la percepción de la emergencia de la biodiversidad. En última instancia, el informe estima que la inversión corporativa a nivel mundial para preservar la biodiversidad representa menos del 5% de lo que se necesita por parte de todos los grupos de interés (públicos y privados) en los próximos 10 años para revertir los daños causados al ecosistema de la biodiversidad.
Falta de estrategias para proteger la biodiversidad
Las organizaciones son cada vez más conscientes de las consecuencias catastróficas de la pérdida de biodiversidad y otros daños relacionados con los ecosistemas. Sin embargo, solo una cuarta parte de las organizaciones dispone de una estrategia de biodiversidad, siendo Australia (15%), Alemania (16%), Canadá (17%) e Italia (18%) los países más rezagados. Estas estrategias pueden incluir iniciativas como la inversión en prácticas circulares, el desarrollo de objetivos científicamente fundamentados o considerar el impacto de la biodiversidad en las decisiones de inversión. En promedio, los proyectos de conservación o restauración de la tierra son más importantes que los de agua dulce y de los océanos. Además, únicamente el 16% de las organizaciones ha realizado una evaluación del impacto de su cadena de suministro en la biodiversidad y tan solo el 20% ha hecho lo mismo con sus operaciones.
En general, los ejecutivos están de acuerdo en la importancia de conservar la biodiversidad, pero el 59% de los encuestados considera que las complejidades que rodean a la biodiversidad conllevan retos. A diferencia del carbono, que es fácil de definir, medir y documentar, la biodiversidad es más difícil de precisar en términos de cuantificación, observación y, en consecuencia, de evaluar su impacto. Estas complejidades se atribuyen a la ausencia de puntos de referencia uniformes a nivel mundial para medir y supervisar los impactos sobre la biodiversidad, a las ambigüedades en el establecimiento de objetivos y a la falta de personal capacitado en materia de biodiversidad.
“Todas las empresas dependen de la biodiversidad y los ecosistemas: ya sean recursos directos, como el agua o las fibras, o de servicios ecosistémicos, como la regulación del agua o la fertilidad del suelo, una biosfera próspera y en funcionamiento es fundamental para el bienestar humano y los objetivos más amplios de sostenibilidad, así como el crecimiento y la estabilidad económicos. Sin embargo, muchas organizaciones subestiman su impacto directo en la pérdida de biodiversidad y su responsabilidad en la protección y restauración de esta”, comenta Cyril Garcia, Director de Servicios Globales de Sostenibilidad y Responsabilidad Corporativa del Grupo y miembro del Consejo Ejecutivo del Grupo Capgemini.
“Ha llegado el momento de que las empresas aborden el problema de manera proactiva y se anticipen a las regulaciones obligatorias que están por llegar, sobre todo porque ya existen muchas soluciones y marcos, como el Grupo de Trabajo sobre Divulgaciones relacionadas con la Naturaleza y las prácticas regenerativas, para ayudar a proteger la biodiversidad. La colaboración, la inversión y la innovación serán fundamentales para ayudar a las organizaciones a identificar e implementar estrategias de protección y preservación de la biodiversidad”.
La biodiversidad como parte integral de las cadenas de suministro
Muchas compañías consideran la biodiversidad como un elemento integral dentro de su cadena de suministro. El 58% de los ejecutivos encuestados afirma que su organización ha actualizado su código de conducta de proveedores para incluir aspectos relacionados con la biodiversidad, mientras que casi la mitad menciona que sus organizaciones están invirtiendo en cadenas de suministro libres de deforestación y exigen prácticas de gestión forestal sostenible a sus proveedores.
Al analizar industrias específicas, el sector de bienes de consumo es el que presenta el porcentaje más alto (26%) de las empresas que ya han evaluado el impacto de sus operaciones sobre la biodiversidad, mientras que el sector público/gubernamental muestra el porcentaje más bajo (14%) a este respecto. En el contexto de las cadenas de suministro, el sector minorista afirma tener el porcentaje más alto (26%) de evaluaciones de impacto realizadas, mientras que los sectores agrícola y forestal indican el porcentaje más bajo (10%).
Las prácticas de economía circular resultan ser las más populares
Para hacer frente a la crisis de la biodiversidad son necesarios cambios a nivel organizacional, conductual y cultural, y la adopción de la circularidad desempeña un papel fundamental. Casi dos terceras partes de los ejecutivos señalan que su compañía ha implementado prácticas de economía circular, como el reciclaje y la reutilización, y más de la mitad de las empresas está adoptando medidas para mitigar los impactos negativos sobre la tierra y el agua.
La tecnología desempeñará un papel fundamental para afrontar los retos de la biodiversidad
Un elemento clave para la conservación y restauración de la biodiversidad en el futuro será la integración de soluciones de inteligencia artificial (IA) junto con la tecnología blockchain y sensores para simplificar el monitoreo y trazabilidad de diversas poblaciones, que incluyen animales, aves y plantas. Aprovechar la IA y la robótica puede ayudar a rastrear especies minimizando las alteraciones de la biodiversidad circundante. La biología sintética también será parte de la solución con respecto a algunas de las amenazas más graves para el medio ambiente, como la reducción de la contaminación química y plástica. De hecho, casi tres cuartas partes de los ejecutivos coinciden en que las tecnologías digitales también serán clave para los esfuerzos de su organización en materia de biodiversidad. Para ello, las organizaciones están invirtiendo especialmente en IA y aprendizaje automático (31%), seguido de impresión 3D (30%) y robótica (28%).
Para obtener más información o descargar el informe, visita: www.capgemini.com/mx-es/insights/biblioteca-de-investigacion/biodiversidad/