Con la creación de fundaciones de deportistas como Lorena Ochoa, Eduardo Nájera o Rafael Márquez, parecería que se buscan obtener beneficios fiscales para cuidar las ganancias, pero, al menos en el papel, sus agrupaciones están cumpliendo su papel social altruista.
Según el contador público certificado por el Sistema de Administración Tributaria (SAT) y experto en el tema, Odilón Pérez, difícilmente estos deportistas podrán sacar provecho de sus fundaciones por declarar impuestos en los países donde regularmente compiten, Ochoa y Nájera en Estados Unidos y Márquez en España, y en México únicamente pagarían un complemento en caso de ser necesario.
«Yo diría que sí cumplen su función las fundaciones. No sé en función de las fundaciones de estos jóvenes, pero la finalidad primordial de una fundación es el altruismo y no puedo negar que no se usen como estrategia en muchos casos, pero no creo que éste lo sea», expresó el especialista.
Los tres deportistas obtienen sus ganancias en dólares y euros, pero más que apoyar de su propio bolsillo lo hacen a través de la venta de productos y por medio de convenios con sus patrocinadores.
Reforma, Cancha, p. 19