La industria de la moda es responsable de hasta el 10% de las emisiones globales de CO2, el 20% de las aguas residuales industriales del mundo, el 24% de los insecticidas y el 11% del uso de pesticidas.
El consumidor promedio compra un 60% más de ropa que hace 20 años. Cada prenda se usa muy poco, y aproximadamente el 40% de la ropa en los armarios de los países desarrollados nunca se usa, según la Comisión Económica de las Naciones Unidas para Europa.
De acuerdo al informe Pulse of the Fashion Industry 2018, el 75% de las compañías de moda han mejorado su desempeño ambiental y social. Pero con la demanda de productos más ecológicos aumenta la exigencia de mayor transparencia.
Según Global Fashion Agenda para 2030, el consumo de agua de la industria crecerá en un 50%, su huella de carbono aumentará a 2,791 millones de toneladas y la cantidad de desechos que genera alcanzará los 148 millones de toneladas.
Las oportunidades para que la industria tome medidas incluyen:
- Aumentar la adopción de fibra sostenible para reducir la huella hídrica.
- Utilizar procesos de bajo impacto en la producción de ropa.
- Enfocarse en prendas específicas que ofrecerán las mayores reducciones en huellas de carbono, agua y residuos.
- Informar y permitir a los clientes mejorar el cuidado, la reparación y la reutilización de la ropa.
¿Quién es el culpable del poco avance de la sustentabilidad en la industria del vestido?
Muchos ven la moda rápida como la causa del problema. A pesar del avance en sustentabilidad en la industria del vestido, hay mucho más que se puede hacer.
Algunas marcas ya están utilizando algodón sostenible para reducir el uso de agua, energía y químicos. Pero eso no es suficiente, las personas siguen comprando más ropa que no utilizan.
Desde 2012, hay un aumento de 10% en la adquisición de prendas de vestir, solo en Reino Unido, y mucha ropa que no se ha usado en el último año.
Aunque existe crecimiento de nuevas marcas de moda éticas, no es suficiente. Estas empresas culpan a los consumidores que no están dispuestos a pagar más por productos sostenibles.
El Liderazgo Global en Ropa Sostenible, informa que la industria de ropa usa más de 5 billones de litros de agua en su conjunto, y el 20% de la contaminación del agua dulce proviene del tratamiento textil y el teñido. El procesamiento, incluido el hilado, tejido, coloración, fijación del tinte y acabado, también se suma a la huella hídrica de la ropa.
Los esfuerzos de Levi’s
Consciente de la situación en la industria textil, Levi’s se propuso resolver el consumo insostenible de agua en una parte del ciclo de vida que podrían controlar: su proceso de fabricación.
En 2011, Levi’s debutó con Water Less Jeans, una colección que utiliza más de 20 técnicas innovadoras de acabado separadas que promedian un ahorro de agua de 28% a 96%.
Para 2020, la marca de Levi’s tiene como objetivo fabricar el 80% de sus productos utilizando técnicas Water Less.
Para la marca menos es más. Los productos WaterLess reducen el uso de agua en el proceso de acabado hasta en un 96% para algunos estilos. Ya se han fabricado más de 13 millones de productos WaterLess, y de esta manera se ahorraron más de 172 millones de litros de agua.
Marcas éticas y moda rápida
No es tan simple como decir «compra aquí» o «deja de hacer esto» para ser más sostenible. Es mucho más complejo.
El hecho de que una camiseta esté fabricada con algodón orgánico, no significa que no se haya hecho en una industria que explota a los empleados. Utilizar plástico reciclado del océano no es suficiente. Hay que pensar qué sucede con una prenda después de producirla.
Otro problema es que las marcas tienen que decidir qué significa la sustentabilidad para ellas. ¿Tiene que ver con abordar el cambio climático o tratar de manera justa los empleados? Una sola marca no puede resolver todos los problemas.
La industria del vestido es entre las más contaminantes
La industria de la moda es una de las industrias más contaminantes del planeta.
Según el Banco Mundial, el 20% de la contaminación del agua a nivel global es causada por el procesamiento textil, lo que lo convierte en el segundo mayor contaminante de recursos de agua dulce en el planeta.
Una cuarta parte de los productos químicos producidos en el mundo se utilizan en textiles, y también requiere muchos recursos. Dado que se prevé que el consumo de ropa se disparará en un 60% para 2030, a través del aumento de la moda cada vez más rápida, la industria claramente necesita cambiar de rumbo.
¿Qué hacen las marcas cuando se trata de sustentabilidad en la industria del vestido?
Zara
Para Zara, la sostenibilidad es una tarea interminable.
El nuevo objetivo de Zara es usar el 100% de algodón, lino y poliéster orgánico, sostenible o reciclado.
La marca ya eliminó completamente el uso de bolsas de plástico. Y para 2023, todos los plásticos de un solo uso se habrán eliminado por completo para las ventas de los clientes.
Actualmente, la empresa recicla o reutiliza el 88% de los residuos. Continuará introduciendo sistemas de recolección y reciclaje para todos los materiales utilizados en sus operaciones de distribución de paquetes y prendas colgadas (principalmente cajas de cartón con certificación FSC, plástico reciclado y reciclable, alarmas y perchas) para su reutilización dentro de la propia cadena de suministro o para reciclaje bajo el llamado programa Green to Pack.
H&M
La estrategia de salario justo de cinco años de H&M, es un avance cuando se trata de sustentabilidad en la industria del vestido. No solo lo ha logrado, sino que ha superado todos los objetivos, afectando la vida de casi un millón de empleados.
Otro logro de H&M es la nueva estrategia de empaque: un paso importante hacia la ambición circular.
El objetivo de utilizar solo materiales de reciclados para el embalaje o de origen sostenible para 2030, forma parte del objetivo de crear una mejor experiencia de compra para los clientes y un buen ambiente laboral para los empleados.
¿Qué te parece la sustentabilidad en la industria del vestido? Te leemos en los comentarios.