En los próximos años los retos que enfrentará el sector energético serán en materia de sustentabilidad, cambios estructurales, y el desarrollo de una política que garantice su eficiencia, consideró el titular de la Secretaría de Energía, Jordy Herrera Flores.
Al inaugurar el Foro de Estrategias Energéticas organizado en el Museo Tecnológico (Mutec) de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), dijo que la transición energética requiere de la riqueza petrolera para financiar otras inversiones con fines sustentables hacia los años por venir.
Al participar con su ponencia “Retos del Sector Energético”, aclaró que no está contemplado dejar de lado la explotación de los recursos petroleros a corto plazo, ya que de ellos se obtendrán los fondos para impulsar a las nuevas energías limpias y de origen renovable.
En ese sentido, destacó que en los últimos años la inversión financiera de Petróleos Mexicanos (Pemex) y CFE asciende en promedio a 1.8 billones de pesos, lo que representa una inversión sin precedentes.
Todo esto viene a través de la nueva concepción y las necesidades que se tienen dentro del sector energético, aunque aclaró que hay que entender que no es suficiente la visión de sustentabilidad como tal, ni contar con los recursos, sino medir hacia donde se va a dirigir el sector en los próximos años.
Aclaró que han sido dos los cambios estructurales fundamentales que llevan a la definición del modelo del sector energético, y que son los precios relativos del crudo y del gas, y el cambio climático.
En el primer caso, expuso que hasta hace 10 años el precio del gas era muy elevado contra los hidrocarburos, que se encontraban en un terreno muy económico.
Sin embargo, ello cambió radicalmente en los últimos años al alcanzar picos en los precios del crudo por arriba de los 110 dólares por barril, contra los del gas que están extremadamente bajos con un precio de dos dólares el millón de BTUs.
Ante estos cambios, advirtió que se está buscando incorporar una política pública y energética que enfrente esta disyuntiva, sumado al reto de reducir la emisión de CO2 con la incursión en energías limpias.
Destacó que en materia petrolera, en los últimos años se logró detener la caída de producción del hidrocarburo, al alcanzar los 2.6 millones de barriles, cifra que no se mantendrá estable para alcanzar los 2.8 millones de barriles diarios para 2026.
Sin embargo, subrayó que en el sector hidrocarburos se prevé un mayor crecimiento al pasar de los 6.1 billones de pies cúbicos en 2012 a los nueve billones de pies cúbicos para 2026 con el Shale Gas.
Desde luego, reconoció que la red de gasoductos quedó saturada con niveles de 95%, con una red de 11 mil 542 kilómetros por lo que el proyecto es hacer que ésta crezca para alcanzar los 15 mil 916 kilómetros.
En ese sentido, destacó que el gasoducto noreste será una fuente importante de distribución de gas para los próximos años, lo que es un ejemplo de que es una semilla que requerirá de dos a tres años para madurarse.
Finalmente en materia de energía eléctrica, destacó el incremento en la capacidad de generación, la cual actualmente alcanza los 291 TWh y para el año 2026 se prevé que llegue a los 480 TWh.
Se pretende incrementar la capacidad instalada hasta en 60 a 70% para los próximos años, para lo cual se requiere hacer una apuesta hacia la energía renovable para no solo ampliar esta capacidad instalada, sino la intermitencia con ellas, subrayó.
Actualmente, indicó, es de 62 mil 579 Megawatts (MW) y se prevé que llegue a los 112 mil MW en 2029, precisó.
Fuente: eleconomista.com.mx
Publicada: 10 de Julio de 2012