A través de un préstamo de $50 millones de dólares por parte del Banco Mundial (BM) y una donación de $10.5 millones de dólares de parte del Fondo Mundial para el Medioambiente (GEF), la Sagarpa desarrollará en México esta iniciativa que le permitirá al país alcanzar las metas de la Estrategia Nacional de Cambio Climático de México y los compromisos del Protocolo de Kyoto.
Este programa de cinco años tendrá un costo total de $168 millones de dólares, de los cuales $28 millones de dólares provendrán del gobierno y $80 millones de dólares de contribuciones de los mismos beneficiarios.
El Banco Mundial informó en un comunicado que el objetivo del proyecto es lograr un desarrollo en el agro con baja intensidad de carbono y otros gases que contribuyen al cambio climático.
La iniciativa establece la adopción de tecnologías amigables con el medio ambiente en el sector de los agro negocios y la utilización de biomasas para producir energía.
Siguiendo esta estrategia, se busca aumentar el número de pequeños y medianos agro negocios que adopten tecnologías sustentables, disminuir toneladas de emisión de gases de efecto invernadero y contribuir en la formulación exitosa de políticas públicas por parte de la Sagarpa.
«Las iniciativas que engloba el proyecto son operaciones de inversión verde. Las mismas constituyen una parte fundamental de nuestro compromiso con el gobierno de México en la agenda de cambio climático», señala el director del BM para México y Colombia, Axel van Trotsenburg.
A través de asistencia financiera y técnica, el proyecto contribuirá a mejorar la eficiencia energética, a optimizar la administración de deshechos (en algunos casos, convertirlos en electricidad) en las principales áreas de producción de leche y cría de cerdos. Así, los beneficiarios tendrán resultados financieros positivos y contribuirán en los esfuerzos de mitigación en materia de cambio climático, señala el organismo internacional.
Además, apoyará a la Sagarpa en la preparación e implementación de un plan de acción para el sector agrícola, el cual formará parte del Programa Especial para Cambio Climático (PECC), revelado por el presidente Felipe Calderón en el 2008.
La iniciativa está diseñada para cubrir todo el territorio nacional, pero se enfocará en los 10 estados que concentran la mayor parte de actividad agrícola en el país.
La estrategia prevé la inversión en tecnologías ambientalmente sustentables para los agronegocios que participan en diferentes niveles en la cadena de producción agrícola, los cuales podrán mejorar su eficiencia en consumo de energía y en la administración de biomasas para convertirlas en fuente de energía.
Adicionalmente, se invertirá en la preparación e implementación de proyectos sustentables, así como en capacitación sobre las nuevas tecnologías propuestas.
