Como ya sabemos, México es no solamente el país más obeso del mundo sino también el más consumidor de refrescos. Muchas organizaciones han trazado una correlación entre estas dos estadísticas, y el Gobierno de la República parece estar de acuerdo, ya que la reforma fiscal incluye un impuesto a estas bebidas. La medida es apoyada por organizaciones como la Alianza por la salud alimentaria, y seriamente cuestionada por empresas como Coca-Cola.
El pasado lunes 30 de septiembre, la ya mencionada Alianza denunció que su campaña televisiva no ha sido aceptada por Televisa, TV Azteca ni Milenio.
Esta campaña, como otras que ha impulsado el grupo de ciudadanos y empresas, tiene por objetivo educar a la población respecto a las consecuencias de salud que conlleva el consumo excesivo de refrescos, así como los beneficios que tendría el gravamen a estos productos. Según el spot, la recaudación que significaría el impuesto se usaría para instalar bebederos en escuelas, entre otras acciones que beneficiarían la salud infantil.
En su comunicado, Alianza por la salud alimentaria afirma que: «El anuncio ‘Impuesto a los refrescos para bebederos en las escuelas’ fue producido con el fin de informar sobre los daños que produce el alto consumo de refrescos en la salud de los mexicanos y de apoyar la iniciativa de un impuesto a estas bebidas para que se dirijan los recursos recaudados a la introducción de bebederos de agua en las escuelas y espacios públicos”
De acuerdo con esta información, Televisa simplemente no ha respondido a la solicitud de una pauta, mientras que TV Azteca y Milenio afirman no contar con espacios publicitarios. Sin embargo, las tres televisoras continúan transmitiendo publicidad de empresas refresqueras.
Como resultado de esta situación, la Alianza está difundiendo su información a través de sus redes sociales.
